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El Bilbao Basket apela a la épica y se clasifica para la siguiente ronda de Eurocup (90-84)

Los bilbaínos lograron una sufrida victoria ante el Oldenburg, el choque no se decidió hasta el último minuto en el que Mumbrú hizo posible el milagro.
Ana Hevia
miércoles, 18 de diciembre de 2013, 23:46 h (CET)
Ficha técnica
90- Bilbao Basket: Raúl López (11), Pilepic (2), Mumbrú (22), Hervelle (6), Gabriel (21) -cinco inicial--; Grimau (5), Bertans (8), Kavaliauskas (6) y Markota (9).

84- EWE Baskets Oldenburg: Joyce (18), Kramer (2), Paulding (6), Aleksandrov (13), Crosariol (8) --cinco inicial--; Freese (9), Jenkins (20), Wysocki (8) y De Mello (-).

Parciales: 21-21, 25-20, 11-20 y 33-23

Árbitros: Jovcic (Ser), Koromilas (Gre) y Nuran (Tur).

Incidencias: 8.431 espectadores en el Bilbao Arena.

Datos destacables
Lo mejor: Mumbrú y Gabriel
Impresionantes los dos jugadores, el capitán por anotar la canasta que hizo que su equipo pase de ronda en Eurocup (22 puntos y 19 de valoración). Y el venezolano por firmar una gran segunda mitad tanto en defensa como de cara al aro (21 puntos y 24 de valoración).

Lo peor: Pilepic
Al croata le está costando llegar a ser el francotirador que espera su equipo, y más con Bertans entre algodones. Jugó casi 18 minutos y anotó tan sólo 2 puntos.

El dato: Tras cinco derrotas consecutivas los bilbaínos logran lo que parecía imposible, pasan con este triunfo a la siguiente ronda de Eurocup.
El Bilbao Basket logra la clasificación para el “Last 32” de Eurocup tras vencer a EWE Oldenburg (90-84). Los bilbaínos apoyados por el “efecto Miribilla”, que convirtió el pabellón en un auténtico infierno para los teutones, apelaron a la heroica para lograr un triunfo que al comienzo del tercer cuarto parecía inalcanzable. 

Mumbrú se convirtió en el héroe de la noche tras anotar una canasta a falta de un segundo que dejaba a su equipo con seis puntos de ventaja y, con el billete sellado para la siguiente ronda. El capitán, que había sacado un 2+1, tiró de picaresca fallando adrede el tiro libre adicional para obligar a que hubiese rebote y, que el EWE no tuviese un último tiro cómodo. 

El conjunto alemán saltaba a la cancha muy centrado, con un juego rápido que sorprendía a “los hombres de negro” que salían fríos y les caía un parcial de 0-8. Pero reaccionaban los bilbaínos para remontar la distancia y adelantarse, con triple de Germán Gabriel, al Oldenburg (12-9). 

Intercambio de golpes en la cancha con alternancias en el luminoso (14-14, 16-16, 16-18). Cogían una ligera ventaja los teutones pero un triple de Mumbrú y un palmeo de Kavaliauskas sobre la bocina, devolvían la igual al finalizar el primer cuarto (21-21). 

Volvía Raúl López a la pista en el segundo cuarto y lo notaba el conjunto bilbaíno que lograba una renta de cinco puntos, los locales cambiaban de cara cuando el base de Vic entraba en escena. A pesar del juego errático de los vascos, que a veces parecían jugar de forma improvisada, las canastas de Raúl López mantenían a los locales en el partido. 

El conjunto germano seguía imponiendo un juego rápido en la pista mientras que los bilbaínos aguantaban las embestidas subiendo su intensidad en defensa. Se venían arriba los pupilos de Pueyo que encadenaban seis puntos consecutivos para tomar ventaja en el luminoso. Una canasta de Mumbrú sobre la bocina dejaba el marcador 46-41 al descanso. 

Tras la salida de vestuarios Germán Gabriel se echaba el equipo a la espalda con gran acierto de cara al aro y con buenas acciones en defensa, los puntos del venezolano mantenían a los bilbaínos por delante en el marcador. 

Pero los alemanes, gracias a los puntos de Joyce y Aleksandrov, le daban la réplica a los locales y volvían a ponerse por delante en el luminoso. Un triple de Jenkins ponía el final al cuarto dejando a los germanos cuatro arriba (57-61). 

Los diez minutos finales arrancaban con otro triple de Jenkins, una jugada calcada a la última del tercer cuarto y que también acababa con el norteamericano anotando desde la esquina. Con una renta de diez puntos en contra le tocaba al Bilbao Basket buscar la remontada y volvía a aparecer el venezolano para acortar a tres la distancia; el Oldenburg seguía imponiendo un ritmo rápido en la cancha mientras que los locales hacían la goma, con momentos de claridad y otros en los que se les apagaban las luces. 

Un 2+1 de Germán Gabriel daba la vuelta al marcador y de nuevo eran los vascos los que se ponían por delante; pero aparecía Jenkins para hacer un traje a los bilbaínos anotando todo lo que cayese en sus manos, desde la línea del 6,75 o desde la pintura. Una autentica bestia negra para los de Pueyo que sumaba 20 puntos. A falta de un minuto reinaba la igualdad en el marcador y Miribilla rugía aún más fuerte para alentar a los suyos en busca de la épica. 

Cinco puntos consecutivos, triple de Markota y canasta de Mumbrú, dejaban a los locales cinco arriba a falta de 30 segundos. Joyce se iba a la línea de tiros libres, sólo anotaba uno de ellos pero dejaba a los alemanes dentro del “Last 32” a falta de 16 segundos. En el último suspiro, con Miribilla al borde del infarto, aparecía el capitán de los “hombres de negro” para hacer realidad el milagro. Mumbrú anotaba en el último segundo una canasta que dejaba a los de Pueyo seis arriba en el marcador y, con la clasificación para la siguiente ronda en el bolsillo (90-84).

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