La ley es clara: todos los vehículos tienen que disponer de un seguro en vigor que cubra, al menos, la Responsabilidad Civil Obligatoria ante un eventual siniestro. Si eres propietario de un vehículo, estás obligado a contratar y renovar un seguro que cubra la responsabilidad civil de quien conduce el vehículo. El objetivo es que todos los conductores que sufran un accidente de tráfico puedan responder de sus posibles responsabilidades con las víctimas, ya se trate de un accidente con víctimas o de un pequeño golpe que provoca una abolladura. Por eso, el seguro de responsabilidad civil es obligatorio. Es el llamado seguro a terceros. Y por eso, la moto debe estar siempre asegurada, aunque no circules mucho con ella o vivas en una aldea.
Ten en cuenta que incumplir la obligación legal de contratar un seguro obligatorio puede suponer una sanción económica que va desde los 601 euros a los 3.005 euros. La cuantía concreta depende de las circunstancias en las que se haya circulado, la gravedad del perjuicio causado o el tiempo que hayas circulado sin el seguro obligatorio. Además, si no tiene seguro la moto debe ser inmovilizada y trasladada a un depósito.
Por último, si tienes un accidente de moto sin disponer del seguro obligatorio, tendrás que asumir el pago de todos los daños personales o materiales que se hayan producido. Si el accidente provoca daños graves, esta cifra puede ser muy abultada.
Tipos de seguros de moto Una vez establecida la obligatoriedad del seguro de moto, cabe preguntarse qué tipo de seguro puedes contratar. En primer lugar, están los llamados seguros a terceros:
A terceros: es el seguro obligatorio, y suele incluir también el seguro de asistencia en carretera, de modo que puedas conducir con la garantía de que acudirán en tu ayuda en caso de que sufras un percance mecánico.
A terceros con robo e incendio: este seguro amplía el seguro a terceros con coberturas para incidentes habituales en estos vehículos, como el robo o el incendio.
A terceros con pérdida total: una cobertura más amplia, incluyendo el siniestro total con o sin culpa, robo e incendio. En este caso, debes comprobar cuál es la valoración que los seguros harían en caso de siniestro total, que depende generalmente de la antigüedad.
Todo riesgo con daños por colisión: este seguro también cubre los daños por colisión, además del seguro obligatorio a terceros.
Todo riesgo con daños propios: esta cobertura garantiza la seguridad personal ante cualquier imprevisto. De esta forma, quedan cubierto no solo los daños de tu moto, y los daños a terceros, sino también los daños personales que sufras por un accidente.
Afortunadamente, hoy es muy sencillo saber cuánto te costaría asegurar tu moto con cada una de estas modalidades. Muchas aseguradoras disponen de herramientas online que te permiten calcular el precio de tu seguro de modo de manera sencilla y rápida. Basta ir introduciendo algunos datos, como el tipo y la marca de moto que tienes, la antigüedad de tu carné o los partes que has dado en los últimos años, para conocer cuánto te costaría asegurar tu moto.
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