Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Animalistas | Animales

España y el maltrato animal

Cadáveres baratos de perro, cadáveres caros de toro
Julio Ortega Fraile
miércoles, 27 de mayo de 2015, 22:01 h (CET)

2805157

En un país que oscila entre los noventa días de pena por atar a un perro a una gran piedra en la playa y esperar a que se ahogue con la subida de la marea (ocurrió en 2013 en Ayamonte y el autor, que no pisará una celda, acaba de ser juzgado), y los treinta mil euros de salario (subvencionado, de otro modo el dinero recaudado con las entradas nunca alcanzaría para pagar tal suma al matarife y su cuadrilla) por torturar y matar a seis toros en una tarde, trofeos municipales por alancear hasta la muerte a uno en Tordesillas o comprar pichones para soltarlos y acabar con su vida en dos segundos reventándolos de un disparo, o en varios días dejando que se desangren con sus alas rotas, el activismo por los derechos de los animales adquiere el carácter de necesidad urgente.

Pero no hay que alarmarse, esta sólo es una cuestión ética, no vital, al menos no para los humanos, porque está claro que se puede vivir sin sentir dolor ante el sufrimiento ajeno, incluso causándolo, ni tampoco rabia frente a la crueldad y ni siquiera vergüenza porque los crímenes vayan de la casi impunidad a la recompensa cuando las víctimas son de una especie diferente a la nuestra. De hecho se puede vivir muy tranquilo y hasta muy bien en España cometiéndolos. Unos, los ilícitos, porque están a precio de saldo, y otros porque aquí son al fin deporte, arte, espectáculo, diversión, o de “interés social”. Y porque los que mueren no votan ni pagan impuestos, aunque parte de los nuestros sí sirvan a menudo para que no dejen de matarse.

Parece, sin embargo, que entre tanta aberración moral, tanta atrocidad carnal, tanto desprecio, tanta ignorancia y tanta saña las puertas de los ruedos, o de los circos, empezarán a abrirse para que salgan de su interior los condenados a la esclavitud, a la tortura y a la muerte con la negativa de las formaciones políticas que obtendrán la alcaldía de algunos ayuntamientos, como Madrid, a seguir financiando con dinero público la tauromaquia, o con su intención de declararse ciudades amigas de los animales. Esperemos que también comiencen a cerrarse, en las cárceles, detrás de aquellos capaces de cometer crímenes con los animales.

Noticias relacionadas

Parece que algunos medios vienen a decir que no ha sentado bien por estas tierras que algunas multinacionales de la gran comunicación —modelos del gran capitalismo operante—, que se ventila en las redes sociales, no hagan caso a los jefes políticos de aquí y hayan decidido pasar de la censura, siguiendo la nueva tendencia política, con destino a ser exportada.

Se suele afirmar que la realidad supera a la ficción, aunque no queda claro a qué se refiere dicha aserción, pues la ficción suele inspirarse en la realidad, por aquello del Arte imitando a la Naturaleza. Lo que sí parece es que tendemos a preferir la ficción, cuyos contornos se nos ofrecen siempre definidos y cuyo desarrollo atesora una lógica interna expresada en forma de relato, de diálogo o de variadas formas audiovisuales.

González Amador está acusado de dos delitos de fraude fiscal y un tercero por falsedad documental y proponía asumir ocho meses de cárcel y pagar unos 525.000 euros para evitar ir a juicio, con lo que reconocía sus delitos y sería un "defraudador confeso" (D.C).

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto