Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Odio | Delitos | Código Penal | Veracidad

Incitación al odio... (¿?)

DecíaRyszard Kapuscinski: 'Para ser buen periodista hay que ser buena persona'
Ángel Alonso Pachón
martes, 11 de mayo de 2021, 02:37 h (CET)

Hay personas de cuyo nombre no merece la pena acordarse.


El código deontológico de un periodista se basa fundamentalmente en dos principios:


 “la responsabilidad social y la veracidad informativa”


Hay personas de cuyo nombre no merece la pena acordarse.


Una pequeña pantalla que llamamos televisión, refleja cada cosa que se dice en cientos de miles de hogares.


“… la televisión influye en las conductas, impone modelos de éxito social, criterios de belleza, de estética, de comportamientos, etcétera” (Natalia Tamayo)


Hay personas de cuyo nombre no merece la pena acordarse.


En una sociedad polivalente, con libertades y derechos, la convivencia sólo tiene un principio fundamental: el respeto.


 “¿Saben lo que deseo a todos los que votaron al PP en Madrid? Una buena enfermedad con diagnóstico tardío fruto de los recortes” (Celia Blanco, periodista, colaboradora en TVE).


Hay personas de cuyo nombre no merece la pena acordarse.


Las dudas de la ignorancia: El delito de incitación al odio.

                                   

Está regulado en el artículo 510 y 510 bis del Código Penal.    

                                           

Persigue la conducta de alguien que promueva por razones ideológicas el odio, la hostilidad, la discriminación o la violencia contra un grupo, una parte de dicho grupo o contra una persona determinada.


Las reflexiones de la ignorancia:


Una.


¿Dónde está el Partido Popular? ¿Le pilla muy lejos la Sede Judicial? ¿Tan poco le importan sus votantes?


Otra.


Los Fiscales ¿no deben actuar de oficio, cuando los presuntos actos son públicos y notorios?

Noticias relacionadas

El recuerdo de todos los que nos han precedido en este mundo al que no pedimos venir, ni exigimos no morir, es una obligación moral tenerles presentes, por lo que fueron, por lo que aportaron, por su bondad, por sus errores y, sobre todo, porque el misterio de la VIDA incluye el misterio de la MUERTE y en este último nos encontramos todos. Amigos todos, a muchos de vosotros no pudimos conoceros ni despedir vuestro adiós, pero sabemos que fuisteis parte de este mundo y por tanto parte nuestra.

La ineficacia, falta de empatía y desconexión de la realidad de la clase política en esta tragedia va a marcar un antes y un después. Y si no, es que estamos todos muertos. Cuando habían emergido del lodo - este sí, lodazal de verdad - decenas de cadáveres y toda España ya sabía que la catástrofe era de las históricas, el Congreso de los diputados mantuvo su sesión plenaria y las votaciones previstas para el día.

Definición de ética: es la parte de la filosofía que trata de la moral y de las obligaciones del hombre. De ahí se desprende lo que verdaderamente es moral: no se cae bajo la jurisdicción de los sentidos por ser de la apreciación del entendimiento o de la conciencia. ¿Y bien? ¿Qué pasa si es verdad que todos tenemos un precio? Si fuese afirmativa la respuesta resultaría que apenas podríamos quejarnos cuando alguien, por ejemplo, fuera un caradura.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto