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Ficha técnica
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60 - Herbalife Gran Canaria: Kevin Pangos (13), Xavi Rabaseda (1), Sasu Salin (10), Eulis Báez la (7), Sitapha Savané (12) - Quinteto titular - Albert Oliver (2), Brad Newley (4), Alen Omic (8), Kyle Kuric (2), Pablo Aguilar (1). Entrenador: Aíto García Reneses.
88 - FC Barcelona: Tomas Satoransky (11), Pau Ribas (9), Álex Abrines (10), Justin Doellman (14), ShaneLawal (0) - Quinteto titular - Aleksandar Vezenkov (0), Marcus Eriksson (16), Moussa Diagné (4), Brad Oleson (8), Carlos Arroyo (7), Startos Perperoglou (2), Ante Tomic (7). Entrenador: Xavi Pascual
Parciales: 13-16, 19-25, 15-30, 13-17.
Árbitros: Juan Carlos García González, Antonio Conde, Carlos Peruga
Incidencias
: Primera semifinal de la Supercopa Endesa Málaga 2015 disputada en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena. Sin eliminados |
Datos destacables
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Lo mejor: El Barça, de 3 en 3. El equipo de Xavi Pascual se metió en una nueva final de la Supercopa pese a su evidente falta de rodaje gracias a su extraodinario acierto en el perímetro, con un total de 14 triples.
Lo peor: Castigo para los canarios El equipo de Aíto ofreció una buena imagen e hizo lo que estuvo en su mano, pero poco más podían hacer ante semejante festival anotador de los azulgranas. |
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El FC Barcelona ya espera rival en la final de la Supercopa Endesa tras superar con claridad al Herbalife Gran Canaria, que poco pudo hacer ante la superioridad de su rival. Los azulgrana dominaron el choque de principio a fin, y les bastó apretar más en defensa y mejorar su porcentaje de acierto para acabar con la resitencia isleña. Con ambos equipos aún de pretemporada, las defensas brillaban por su ausencia en el arranque del encuentro, lo que dio lugar a un intercambio de canastas en el que Justin Doellman empezaba a tomar ventaja desde el 6'75. El Herbalife Gran Canaria aprendió pronto la lección y se puso las pilas atrás, pudiendo acercar posturas de la mano de un Sitapha Savané por el que no parecen pasar los años. Entre tanto, el juego del FC Barcelona repetía una y otra vez el mismo guión sin demasiado resultado, lanzando muchos triples para tan poco acierto. La entrada a pista de un pivot de mayor presencia ofensiva como Ante Tomic no fue suficiente para librar al cuadro azulgrana de su propia irregularidad, castigada con un parcial en contra de 5 - 0 al final del primer periodo (13 - 16). La superioridad en el rebote era el mayor argumento de los amarillos para mantenerse con vida en el encuentro, ante las rafagas de talento de los exteriores barcelonistas. La conexión de Kevin Pangos con Alen Omic suponía el mayor quebradero de cabeza para Xavi Pascual, que no encontraban la manera de frenar de minimizar la influencia del base canadiense. Los internacionales Pau Ribas y Álex Abrines surgieron entonces para tirar del carro y con cinco puntos cada uno ponían tierra de por medio. Una mejor actitud de los azulgrana en labores defensivo empezó a ahogar las vías de anotación del Herbalife Gran Canaria, que no encontraba más solución en ataque que tiros aislados de Sasu Salin y Kyle Kuric. Como no podía ser de otra manera, un nuevo triple, esta vez de Carlos Arroyo, dejaba la máxima ventaja al filo del descanso (32 - 41) El paso por vestuarios pareció arengar a los catalanes a seguir sumando de tres en tres como único medio de alzarse con la victoria, con Tomas Satoransky comandando las operaciones para dejar el partido listo para sentencia. La excesiva dependencia en la creatividad de Kevin Pangos, el más destacado de los amarillos con 13 puntos y 6 asistencias, empezaba a pasar factura al equipo de Aíto García Reneses, falto de ideas y alternativas en su juego de ataque. La notable diferencia de talento entre ambos equipos no tardó de trasladarse en el marcador, con un parcial de 15 - 30 al final del cuarto que hablaba por si solo. Pese a que la actitud y las ganas del cuadro isleño fue incuestionable, sus posibilidades se esfumaron en el mismo momento en el que los azulgranas afinaron un poco la puntería, llegando a elevar la diferencia hasta una máxima de 30 puntos. Con el partido listo para sentencia y abocado a los minutos de la basura, ambos técnicos aprovecharon el cuarto periodo para poner en la pista a sus piezas menos habituales. Lo más destacable de los últimos diez minutos fue el regreso a la máxima competición de Marcus Eriksson, que lejos de desaprovechar su oportunidad y destapando todo su su buena con una exhibición en el tiro, convirtiéndose en el máximo anotador del encuentro con 16 puntos en menos de 14 minutos.
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