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El Rayo aprovecha el viento a favor y golea al Espanyol (3-0) | ||||||||||
| Javi Guerra, protagonista del partido | ||||||||||
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Juego de pizarras en la primera mitad Los de Sergio González tenían la lección bien aprendida y adelantaron líneas al máximo para obligar al Rayo a jugar en muy pocos metros. Esto mismo le había salido a la perfección en el duelo de la pasada campaña. Pero Jémez también le había hablado a los suyos cómo había que detener las embestidas de la dupla Asensio-Caicedo, que hoy anduvo desaparecida. Aun así, los catalanes dispusieron de la primera gran ocasión del encuentro pasados los diez minutos de juego, en una internada de Hernán Pérez por la derecha. El centro del paraguayo lo cabeceó Víctor Álvarez en el segundo palo, encontrándose con una muy buena intervención de Toño, que desvió el esférico con contundencia evitando un 0-1 que podría haber cambiado el devenir del partido. El penalti empezó a declinar la balanza A partir de ese momento, el Rayo se fue haciendo con el dominio del juego, evitando perder el esférico en situaciones comprometidas. Javi Guerra fue el primero en probar a Pau, con un disparo muy flojo y centrado, pero sería Patrick Ebert quien sacase el primer “uy” de la grada. El alemán cabeceó a la perfección, pero el balón se encontró con la cepa del poste y se marchó desviado. De los mismos hombres saldría la jugada que terminaría con el primer gol del encuentro. Pasada la media hora, Ebert ponía el balón para que Javi Guerra rematara casi a placer y Enzo Roco llegaba por detrás para derribar al centro delantero rayista. Prieto Iglesias señaló la pena máxima y Trashorras la convirtió, pese a la buena intuición de Pau. La expulsión de Víctor Sánchez hizo el resto Tras el descanso, el primero en mover ficha fue Jémez. El canario no estaba contento con sus bandas y optó por la técnica de Embarba para la derecha y la potencia y velocidad de Bebé por la izquierda, esta última muchísimo mejor explotada esta noche. Antes, Lass ya había podido marcar el segundo. Poco después, Sergio optaba por dar un paso al frente con la puesta en escena de Montañés y, sobre todo, de Burgui. Pero dos minutos después Víctor Sánchez derribaría a Baena en el centro del campo y echaría al traste todo intento de remontada. El medio centro del Espanyol veía la segunda amarilla y dejaba a su equipo con diez. Con uno más sobre el campo, el Rayo Vallecano fue muy superior y sentenció en dos acciones casi consecutivas de Javi Guerra. El malagueño se aprovechó primero de una gran internada de Bebé para marcar a placer en el minuto 75 y dos minutos después se sacó un golazo de la chistera. Los blanquiazules, ni de penalti Con el partido visto para sentencia, y en la última acción del mismo, Tito golpeaba el balón con la mano y veía la segunda amarilla. Burgui tendría la oportunidad de maquillar el resultado desde el punto de penalti, pero de nuevo Toño lo impidió. Hoy no era el día de los jugadores del Espanyol y sí el del guardameta alicantino. La victoria urgía para un Rayo Vallecano que llegaba a esta jornada con tres derrotas consecutivas y que vuelve a situarse en la mitad de la clasificación antes de visitar Ipurua el próximo domingo. El Espanyol seguirá dos puntos por encima en la clasificación, aunque con el hándicap de ser el equipo más goleado del campeonato, con más de dos tantos de promedio por partido. El domingo que viene recibirá la visita del actual colista, el Granada.
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3- Rayo Vallecano: Toño (3); Tito (1), Llorente (2), Zé Castro (2), Rat (1); Raúl Baena (2), Trashorras (2); Lass (1), Jozabed (1), Ebert (2); y Javi Guerra (3).
0 – RCD Espanyol: Pau López (1); Arbilla (0), Álvaro (2), Enzo Roco (0), Fuentes (1); Víctor Sánchez (0), Cañas (1); Hernán Pérez (2), Marco Asensio (1), Víctor Álvarez (1); y Caicedo (0).
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