Conjunto de elementos con caracteres comunes.
En el área relativa al hombre, socialmente más utilizada, podemos distinguir la “casta”, la “condición”, la “categoría”, el “género” y la “idiosincracia” (pelaje, calaña, tipo).
Si hablamos de grupos de personas clasificadas por su “status” social distinguiríamos “el GRUPO”, “el estamento”, “la clase social” (alta-media-baja-pobre). Este último se basaría, sobre todo, en función de los ingresos medios anuales.
Pero, ¿qué grupo social podemos considerar como el más elemental?... LA FAMILIA. En la FAMILIA, el ser humano, “desde su nacimiento, se encuentra inmerso en él y es ahí donde vive y desarrolla las experiencias y habilidades que servirán como base para la vida en todos los ámbitos de su existencia”.
Pero, hoy, quisiera destacar el nuevo sentido de “GRUPO”, como conjunto de personas que coordinan y aúnan sus esfuerzos para un objetivo común.
En dichos GRUPOS, los objetivos son COMPARTIDOS, la responsabilidad podrá considerarse INDIVIDUAL o MUTUA y el éxito siempre será COLECTIVO.
También el GRUPO puede que los objetivos se designen a nivel INDIVIDUAL y como consecuencia la responsabilidad será INDIVIDUAL y el éxito o fracaso, igualmente, INDIVIDUAL.
Políticamente, la sociedad actual, ha elegido, por un sentido de LIBERTAD UNIVERSALIZADA, la opción de grupos de INTERESES con estructuras políticas y características socio-económicas, aunque todos ellos excesivamente PERSONALIZADOS en individuos o camarillas de poder.
Para este sistema, hoy día GLOBALIZADO EN CASI TODAS LAS SOCIEDADES, sólo existe un antídoto natural: LA LIBERTAD INDIVIDUAL, la REFLEXIÓN INDIVIDUAL, la DECISIÓN o VOLUNTAD INDIVIDUAL y los colectivos de sentimientos simétricos frente a los poderes FÁCTICOS, fuertes por el poder de sometimiento pero nunca por ideologías JUSTAS SOCIALMENTE.
Aquí, ahora, en España, parece que se ha elegido la opción de grupos de INTERESES con estructuras políticas y características fundamentalmente socio-económicas.
El camino es peligroso porque el apocalipsis de nuestra cultura vendrá dado por el individualismo obsesivo, por el negacionismo del otro, por la creación de becerros endiosados por el oro de la “Casta”.
Si queremos enriquecer el maravilloso entorno de la vida, socialmente compartida, sólo tenemos un camino la LIBERACIÓN DEL INDIVIDUALISMO y el RESPETO DE LO COMÚN.
Dios creo, hombre volverá siempre a su origen, EL POLVO.
Podemos itinerar enriqueciendo el camino, pero sólo lo podremos conseguir cogidos de la mano y mimando la COMUNIDAD, sin CASTAS, sin GÉNEROS, sin ESTAMENTOS.... Como HOMBRES que caminan dejando la huella mejorada que heredó.
|