Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Salud
Etiquetas | oidos | Avión

El 20% de la población tiene riesgo de sufrir problemas de oídos al volar en avión

El barotrauma del oído medio como consecuencia de los cambios de presión puede causar hasta dolor y pérdida de audición
Francisco Acedo
miércoles, 7 de septiembre de 2016, 08:23 h (CET)
El 20% de la población tiene riesgo de sufrir problemas en los oídos como taponamiento o dolor al volar en avión, según afirma la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC). Se conoce como barotrauma y se produce por cambios bruscos de presión, por lo que también puede aparecer como consecuencia del ascenso o descenso de puertos o montañas, viajes en tren, así como la práctica de buceo o el paracaidismo. “Las personas con enfermedades que provocan inflamación de la mucosa nasal, como la rinitis alérgica, son las que mayor probabilidad tienen de sufrirlo”, asegura el doctor Guillermo Til, presidente de la Sociedad Balear de Otorrinolaringología y Patología Cervicofacial.

El barotrauma es un daño que puede producirse en diferentes partes del cuerpo como los oídos, los senos paranasales o los pulmones, como consecuencia de cambios de presión en el entorno, ya sea en aire o agua. “La patología barotraumática del oído medio está causada por cualquier enfermedad que desencadene una inflamación de la mucosa nasal y por tanto de la trompa. Entre las más comunes destacan las infecciones como los catarros o alergias a los ácaros, el polen, etc.”, señala el doctor Til. Los principales síntomas que puede provocar son dolor, sensación de taponamiento, pérdida de audición y mareos.

Cuanto mayor y más rápido sea el cambio de presión, “mayores serán las posibilidades de sufrir un barotraumatismo”, argumenta este especialista. A nivel del mar la presión es de 760 mm Hg, mientras que a 10.000 metros de altura, que es a la que vuelan los aviones, es cuatro veces menor. Aun así, explica, “los aviones están presurizados por lo que en su interior se mantiene una presión equivalente a la de 2.500 metros aproximadamente”.

Una de las funciones principales del oído medio es equilibrar presiones. “Por ello, durante el ascenso de un avión al disminuir la presión ambiente, el aire que está en el interior del oído medio se expande, y la trompa de Eustaquio se abre para facilitar la salida”, explica el doctor Til. Durante el descenso, la trompa de Eustaquio permanece cerrada, facilitando su apertura por alguna acción como para tragar, masticar o bostezar. Sin embargo, añade, este especialista, “si la presión no se iguala, y no entra aire en el oído medio, el tímpano se hunde cada vez más dando lugar a la aparición de dolor en el oído”.

El peor momento es el del aterrizaje puesto que aumenta la presión y disminuye el volumen de aire del oído medio, “lo que provoca que el tímpano se desplace hacia adentro dando lugar al taponamiento del oído”, comenta. Por eso es importante realizar maniobras activas que faciliten la apertura de la trompa y la entrada de aire, como tragar o bostezar.

Consejos para evitarlo
Para prevenir los problemas de oídos al volar, bucear, hacer paracaidismo u otras actividades que impliquen cambios bruscos de presión, “es importante tener en cuenta que aquellas personas con infecciones respiratorias o episodios alérgicos que no estén bien tratados, deben evitar ponerlas en práctica en la medida de lo posible”, aconseja el doctor Til. También es aconsejable, si no hubiera remedio, efectuar maniobras que posibiliten la permeabilidad de la trompa durante el despegue y el aterrizaje, como son la deglución, el bostezo y la masticación.

Puede ser útil, además, la maniobra de Valsalva cuando el avión empieza a descender. “Consiste en tomar aire, tapar la nariz y la boca y soplar aumentando la presión en la faringe, que ayuda a ventilar el oído”, indica el doctor Til. Por otro lado, es importante mantenerse despiertos pues durante el sueño el mecanismo de deglución se ralentiza, lo que impide regular la presión.

Noticias relacionadas

El propósito de la campaña “Ponle cara al ictus” es resaltar la importancia de reconocer los síntomas del ictus y saber cómo actuar. Según datos de la SEN, solo el 50% de la población española sabe identificar los síntomas de la enfermedad y, por lo tanto, no actuaría de forma correcta ante la aparición de un ictus. La protagonista de la campaña es Lourdes Calzado, quien, con solo 34 años, sigue luchando por recuperarse de las secuelas del ictus que sufrió hace dos años.

Un estudio del Barcelonaβeta Brain Research Center, centro de investigación de la Fundación Pasqual Maragall, ha identificado que la acumulación de beta amiloide puede, por sí sola, causar daño cerebral en etapas tempranas del Alzheimer, incluso sin niveles elevados de la proteína tau. Este hallazgo proporciona nuevas claves sobre cómo se desarrolla esta enfermedad que afecta a más de 900.000 personas en España.

Hoy, 4 de febrero, se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer, cita en el calendario que el Grupo Siglo XXI ha querido convertir en su causa protagonista del segundo mes del año, para ir descubriendo diferentes aspectos del tema con el fin de sensibilizar sobre esta enfermedad, especialmente cuando afecta a los más pequeños. El cáncer infantil siempre ha representado un área de creciente preocupación para los sistemas de salud, padres y profesionales médicos.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto