Según la DGT, doscientos conductores, de media, dan positivo cada día por alcohol en las carreteras españolas. Setenta mil cada año… No sé si somos consciente del coste en vidas y económicos.
Entendemos que la cultura del vino está muy arraigada en las costumbres españolas, no existe una fiesta familiar o social o cultural que no exista un consumo de alcohol. Y, entendemos que no es lo mismo bebidas de bajo o medio o alto nivel de alcohol, no es lo mismo el consumo de cerveza, que es el más bajo, el vino que estaría en una franja intermedia, y, el resto de bebidas alcohólicas con más de treinta o cuarenta grados...
Desde los años 1970 se realizan controles de alcohol, llevamos ya cinco décadas, con campañas de publicidad, con este motivo y esta razón y esta finalidad. Me gustaría conocer cuántos accidentes de tráfico acumulados se sabe y se conoce han existido por este motivo o razón o causa, en estos cincuenta años… Quizás, si se pudiese obtener cifras acumuladas de accidentes, en los cuales, los conductores ha existido el alcohol, nos podría dar mucha luz, para entender y comprender esta realidad, quizás, nos asustaríamos de los miles o decenas de miles –de accidentes en los que el alcohol ha intervenido, aunque hayan sido de distinta gravedad y consecuencias-.
¿Cómo hay que convencer a toda la población para que no tenga este hábito o uso o acto o costumbre? Porque muchas veces, te detienes a degustar alimentos en un bar o restaurante de carretera, y te encuentras, que si existen diez mesas de personas, ocho tienen alcohol, por lo general vino, y, lo consumen en mayor o menor grado todos los seres con ojos y manos y boca que están en cada mesa. Se dice a veces, que situar por obligación o consejo en cada restaurante o bar de carretera máquinas o cantinas que están en los límites de los pueblos, con alcoholímetros, quizás podría ser o servir como un fin disuasorio.
Porque no es lo mismo consumir alcohol, y no saber cuánta cantidad, que hacerse la prueba a sí mismo, y, darse cuenta, que tiene tal cantidad. Cierto es que quién ha bebido ya una cantidad, ya sabe lo suficiente. Quizás, indicar en publicidad la cantidad de alcohol, sería evidencia suficiente, según las distintas bebidas. Quizás, es más fácil y más económico y mejor continuar las campañas, de nada de alcohol. Quizás, hipotéticamente cada máquina con esta finalidad, tiene un coste apreciable, quizás quién haya consumido alcohol, nunca se haría la prueba… No lo sé.
La Guardia Civil de Tráfico, AGTC, se nos indica, que el año pasado realizó 6,7 millones de controles de alcoholemia. De los cuales 79.000 conductores dieron positivo al alcohol. No somos conscientes, quizás del todo, o no tenemos la suficiente voluntad, o las malas costumbres ganan a estos conductores, o quizás, debido a mil otras causas, las consecuencias tan negativas y tan nefastas que es conducir con tasas de alcohol no permitidas. No somos conscientes las consecuencias para cada persona que conduce, para los que van con él o ella, en el vehículo, para otras personas si se tienen accidentes con otros vehículos o viandantes. O, simplemente para el coste económico y daños al mismo vehículo, los gastos de las Compañías de Seguros, etc.
Quizás, indicar públicamente, con información y campañas de publicidad e información, que el año pasado un número equis de personas tuvo penas legales, por conducir con tasas incorrectas de alcohol, podría ser una medida disuasoria. Porque no es lo mismo, indicar que no se debe tomar alcohol, que indicar, el año pasado mil personas tuvieron penas de distinto tipo debido a esta razón, incluso cárcel. Cincuenta mil condenas por delitos por conducción por efecto del alcohol. Se indica que en la comunidad de Madrid, el cincuenta y tres por ciento de personas fallecidas en la conducción dieron positivo al alcohol.
Ya saben ustedes, que existen controles de alcohol, que se denomina preventivos, es situarse en un punto y se van haciendo de forma aleatoria. Y, otros cuándo ha ocurrido un accidente de tráfico. No somos conscientes que el alcohol puede alterar en mayor o menor medida la percepción de la realidad, y, que junto con el alcohol, si produce euforia o depresión, u otros efectos, pues se incumplen otras normas de una conducción correcta y adecuada: puede ser se conduzca a una velocidad inadecuada, casi siempre pasando los niveles de las señales, sin sentido común, puede ser que no se tengan suficientes reflejos, puede ser que no se perciba alguna señal, puede ser que se trastoque otras realidades o facultades humanas, en mayor o menor medida…
Modestamente, vamos construyendo un pequeño edificio de artículos de opinión, periodísticos, sobre la Seguridad Vial. No soy especialista y experto en estos temas, solo soy un modesto articulista de opinión. Quizás, lleve realizados una cincuentena de columnas periodísticas con estas temáticas, con la Seguridad Vial como tema, en unos artículos te fijas en unos temas y en otros en otras cuestiones. Pero también es cierto, que arrastramos en nuestras espaldas unos cientos de miles de kilómetros de conducción, en todas las situaciones temporales, y, en distintas carreteras, especialmente secundarias. Y, uno es consciente, que cuándo va deteniéndose en bares de carretera, o, los que están cercanos a ellas, en ese límite entre el pueblo y las vías de comunicación. Especialmente, por las mañanas, de camino al tajo y al trabajo de las personas de esos lugares, raro es, la persona y el conductor que no mezcla y combina el alcohol con el café, la copa con el café. Esta es la realidad…
Decían, los viejos maestros griegos de la filosofía, que no sirve ninguna filosofía que no cure algún mal humano. Ante este tema o ante esta cuestión, qué podemos decir más. Hace ya tiempo, cosa que redacté en forma de palabras, indiqué que se creara como un buzón de sugerencias, que aceptase y se pudiesen escribir sugerencias para la Seguridad Vial, millones de ojos y de cabezas, creo yo que perciben y ven más que unos cientos. Quién sabe, entre esos millones, una persona se le ocurra una idea, y, a otra, se le ocurra otra, y, el efecto eureka se produzca. Porque al final, el sistema de puntos, a alguien se le debió ocurrir, y, parece ser que tiene efectos positivos para la reducción de accidentes de tráfico. De todas formas véase los informes de la DGT…
A veces, me digo a mi mismo, porque no se hace una campaña publicitaria, en todos los medios, indicando, el total de fallecidos en estos últimos cincuenta o setenta años, desde que se tengan cifras. Quizás, nos daríamos cuenta, que han fallecido en España en las carreteras y viandantes, más que de norteamericanos murieron en la Guerra de Vietnam. Quizás, así, nos daríamos cuenta, que cumplir las reglas que la DGT y la Guardia Civil, nos indica, son absolutamente necesarias… Paz y bien y prudencia y sentido común…
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