Albert Cogul se prepara para hacer historia al convertirse en la primera persona española en silla de ruedas en alcanzar el Campamento Base del Everest, a 5.364 metros de altitud. Este ambicioso proyecto, organizado por CIM Project, representa un antes y un después en la inclusión de personas con movilidad reducida en actividades de alta montaña. A través de esta expedición, se busca demostrar que, con el adecuado apoyo y determinación, se pueden superar los desafíos que presenta la montaña.
Albert Cogul, quien quedó parapléjico tras un accidente de parapente en 2016, ha enfrentado numerosos retos en su vida, demostrando que la discapacidad no es un obstáculo para alcanzar los sueños. Su ascenso al Campamento Base del Everest no solo constituye un desafío físico, sino también un poderoso mensaje de inclusión y esperanza para quienes lidian con limitaciones en su vida diaria. “Tras mi lesión medular, uno de los lutos que tuve que pasar fue olvidarme de mi "relación emocional" con la alta montaña y asumir que quedaba descartado poder escalar acompañado de mis hijos a los cuales siempre soñé transmitir mis conocimientos, pero ese sueño roto ha renacido con esta expedición, puesto que mis dos hijos, Ángel y Daniel, van a acompañarme”, expresa Albert.
Albert Cogul, un nómada que no conoce barreras
Albert Cogul, natural de Lleida, ha estado en más de 40 países de cuatro continentes desde que salió de su ingreso en 2017 tras quedar parapléjico. Con su autocaravana adaptada, vive y viaja por todo el mundo haciendo realidad sus sueños en deportes extremos.
Desde entonces, entre algunos de sus logros destacan: podio en la copa de España de esquí alpino adaptado en 2022, dos bronces (2022 y 2024) en los campeonatos de España de Sitwake, en 2021 cruzó el Atlántico en un velero durante 21 días, en 2023 se convirtió en el primer parapléjico en hacer el Camino de Santiago en bicicleta adaptada saliendo de Barcelona y completando 1.500 km en solitario.
La travesía hasta hacer historia
El viaje comenzará el 1 de noviembre con una serie de preparativos en Katmandú, desde donde se volará a Lukla, un pequeño pueblo en la región del Everest. A continuación, el equipo emprenderá una travesía ascendiendo a través de terrenos montañosos desafiantes y realizando paradas en pueblos sherpa, donde podrán reabastecerse y descansar antes de continuar hacia el campamento base. La expedición prevé 12 días para completar el ascenso y regresar a Katmandú.
|