El Alavés jugará la primera final de Copa del Rey en su historia después de eliminar este miércoles al Celta de Vigo en semifinales gracias a un tanto de Édgar Méndez en el minuto 82 (1-0), el cual decantó la eliminatoria en Mendizorrotza --tras el 0-0 de la ida-- que cita a los de Vitoria con el FC Barcelona a finales de mayo.
El cuadro vasco puso la garra, intensidad y saber hacer de una temporada histórica para dejar a un lado a un Celta que buscaba su cuarta final en el torneo del 'KO'. Mauricio Pellegrino, el técnico que se hizo cargo a inicio de temporada de un recién ascendido, puso al Alavés en su segunda final, tras la de la UEFA hace 16 años.
El Alavés buscará su primer título dando rienda suelta a un año de regreso triunfal a la elite. Los de Pellegrino ganaron en lucha y ocasiones y borraron del mapa a un Celta encomendado a la magia de Aspas. Édgar, con tres minutos sobre el campo, hizo el gol que vuelve a dejar al Celta en semifinales por segundo año consecutivo.
El equipo gallego quiso ser más protagonista que en la ida, no solo por las ocasiones, sino por dominio de la situación. Lo logró en una primera mitad parecida a la de Balaídos, con el Alavés saltando en tromba. El Celta supo sacudirse la presión e intensidad local y pronto vio crecer la figura de Pacheco.
El meta del Alavés y Aspas retomaron su toma y daca en las dos opciones visitantes en el acto inaugural. El ariete internacional la tuvo a los 10 minutos, cuando los de Berizzo comenzaron a mandar sobre el césped. El de Moaña estaba en el partido e intentó una espectacular vaselina tras un regalo de Theo.
Los de Pellegrino, obligados en el paso atrás, supieron defenderse bien y encontraron petróleo en el patadón con una buena falta en la frontal con la que Ibai revitalizó el juego local. El bilbaíno rozó la escuadra e hizo buena la pelea de Toquero y Deyverson en la recuperación. Una batalla de pérdidas en el centro del campo, que perjudicó al Celta tras el descanso.
EL CELTA ASISTE IMPOTENTE A LA GESTA DEL ALAVÉS Los de Vigo se convirtieron en espectador del encuentro, incapaces de recuperar el mando como en la primera mitad. El Alavés salió enchufado, con Mendizorrotza entregada y Sergio salvando el disparo casi a bocajarro de Ibai. Los locales inclinaron el campo hacia la meta rival, acechando el gol en una sucesión de ocasiones. Deyverson perdonó también a la hora de encuentro.
El Celta amagó con dar pausa, echando de menos algo más que Aspas en un ataque inofensivo salvo por un remate de cabeza de Wass sin peligro en su dirección. Camarasa tenía las riendas del partido, como ocurrió en la ida, aunque fue su cabeza la que dio inicio al gol local. El '8' del Alavés peinó para el recién entrado Edgar.
Como cuchillo en mantequilla, el revulsivo de Pellegrino, tras el desgaste de Toquero, irrumpió en la defensa visitante para hacer su cuarto gol en Copa. El delirio no impidió al Alavés manejar el empuje final del Celta, con Guidetti y Rossi, a la desesperada. Pese a los más de seis minutos de añadido, Mendizorrotza aguantó de pie para ver a su 'Glorioso' reservar sitio en una final en su temporada de regreso a Primera.
FICHA TÉCNICA. --RESULTADO: DEPORTIVO ALAVÉS, 1 - CELTA DE VIGO, 0. (0-0, al descanso). --ALINEACIONES. DEPORTIVO ALAVÉS: Pacheco; Kiko Femenía, Laguardia, Feddal, Theo; Llorente, Camarasa, Manu García, Ibai Gómez; Toquero (Edgar, min.79; Alexis, min.92) y Deyverson.
CELTA DE VIGO: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Cabral, Roncaglia, Jonny; Wass (Rossi, min.86), Radoja, Marcelo Díaz (Guidetti, min.84), Pablo Hernández; Bongonda (Sisto, min.74) y Aspas.
--GOLES: 1 - 0, min.82, Edgar. --ÁRBITRO: Mateu Lahoz (C.Valenciano). Amonestó a Feddal (min.39) y Theo (min.90) por parte del Alavés. Y a Aspas (min.39) y Marcelo Díaz (min.53) en el Celta.
La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.
Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.
El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.