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Etiquetas | Dragon Ball / Especial Goku-Vegeta

Aportación decisiva de Vegeta ante Célula

El Príncipe Saiyan lanzó un fuerte ataque que distrajo al androide, situación que aprovechó Gohan para dar la estocada definitiva (III)
Manuel Monfort
miércoles, 23 de marzo de 2011, 15:18 h (CET)


Cuando Goku volvió a la Tierra para derrotar al padre de Freezer y al mismo Freezer, que había sido restaurado en forma de cyborg tras su derrota en Namek, no le hizo falta ni pelear pues el Trunks del futuro se cargó a ambos sin despeinarse. Vegeta no daba crédito: ¡Otro súper guerrero! ¡No puede ser! ¿De dónde ha salido éste? Lo que no sabía aún es que ése era su futuro hijo, el que iba a tener con Bulma, y vino del futuro por orden de su madre para advertir de la terrible amenaza de los androides del Dr. Guero.

Especial Goku - Vegeta (Cap.I)

Especial Goku - Vegeta (Cap.II)

Manuel Monfort / SIGLO XXI

El Doctor Guero, único superviviente del ejército de la Cinta Roja, creó unas implacables máquinas de matar que pusieron en peligro la supervivencia del planeta Tierra. Goku se enfrentó al Número 20, una máquina con aspecto de mayordomo, que derrotó al enfermo Saiyan. Éste último, muy castigado por una enfermedad mortal al corazón, no pudo continuar y tuvo que ser reemplazado por un Vegeta que llegó al combate de manera triunfal.

Mostró a todos sus nuevos poderes al transformarse, por primera vez, en un Súper Saiyan y el Número 20, de hecho, no fue rival para él. Entonces, el Doctor Güero, al verse en inferioridad, abandonó el combate y consiguió escapar a su laboratorio. Allí activó a los hermanos Número 18 –una chica rubia – y Número 17 –un chico moreno–, que, precisamente, no le dieron a su creador la bienvenida que éste esperaba. Al verse sometidos al control de su jefe, los dos cyborgs le asesinaron y activaron al Número 16.

En el camino de los tres androides se cruzó Vegeta, que luchó ante la chica rubia con derrota incluida. Tras la derrota, se entreno junto a su hijo para incrementar sus poderes, mientras que otra nave del tiempo, distinta a la de Trunks, llegó a la Tierra. De la nave salió un misterio huevo del que salió Célula, la mayor amenaza a la que se enfrentaron Goku, Vegeta y los demás. Entre tanto, Goku, ya estaba recuperado de la grave enfermedad del corazón gracias a la medicina que le trajo Trunks del futuro.




Evolución de Célula.


Célula, que estaba compuesto por las células de los principales guerreros, era la obra maestra del Doctor Guero y no era de extrañar que atacara a sus enemigos realizando sus propios ataques. Tenía la capacidad de lograr la perfección absorbiendo al Número 17 y Número 18 y lo logró. Ni los intentos del Número 16, ni de Piccolo, convertido en Super Namek, bastaron para frenarle. Tampoco lo consiguieron Vegeta y Trunks, que pese haber superado el nivel de un Super Saiyan, no fueron rivales para Célula en su estado álgido.

Célula, viendo que no tenía contrincante, organizó un torneo de artes marciales llamado los ‘Juegos de Célula’, en el que invitó a todos los terrícolas que quisieran hacerle frente. Se presentaron Goku, ya recuperado de su enfermedad, y sus amigos junto a un Mister Satan que no fue rival para el terrible androide. Célula lo derrotó en un plis plas y, a continuación, luchó contra Goku, en lo que fue un combate ameno hasta que el Saiyan le puso el final. Pero no se terminó por derrotar a su oponente, no, se acabó porque Goku se rindió al considerar que su nivel estaba muy lejos del de Célula.

Cuando Goku se retiró le presentó a Célula a su próximo adversario: su hijo Gohan. La decisión de Goku extrañó a todos. Vegeta no daba crédito, ni tampoco Krilin, ni Célula, ni el propio Gohan que, pese a convertirse ya en un Super Saiyan, no veía prácticamente posibilidades de acabar con un adversario tan poderoso. De hecho, los primeros compases del combate fueron muy desequilibrados a favor de Célula y la contienda solo se equilibró cuando Célula se cargó al Número 16. Ahí, Gohan, sacó toda la rabia que tenía dentro y logró lo que ningún guerrero de su raza había conseguido hasta entonces: transformarse en un temible Super Saiyan 2.



Goku y Vegeta, que todavía no habían alcanzado este nivel, presenciaron atónitos el nuevo poder de Gohan, al que Célula ya veía ahora como una seria amenaza. El combate fue encarnizado, duro y supuso el sacrificio, con muerte incluida, de Goku. El Saiyan, tras ver que Célula iba a autodestruirse a él y a la Tierra, se sacrificó para salvar al planeta y teletransportó al androide al planeta de Kaito. La jugada le salió mal pues Célula no murió, sobrevivió y volvió a la Tierra más fuerte que nunca ante la atónita mirada de los asistentes al torneo.

Gohan, incluso en Super Saiyan 2, no podía con él pero, finalmente, pudo derrotarlo gracias a la aportación de Vegeta. El Príncipe Saiyan, cegado por la rabia a tenor de la muerte de su hijo a manos del androide, se sacó de la chistera su mejor ataque, lo que propició una fatal distracción para Célula. Gohan lo aprovechó y lanzó un ‘Super Kame hame ha’ que acabó destrozando al androide en mil pedazos. El hijo de Goku lo consiguió, pero sin ese ataque de Vegeta no hubiera sido posible.

 
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