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El Sevilla se pone las chanclas (1-1) | ||||||
| El conjunto blanco es incapaz de vencer al Levante y se despide de Europa | ||||||
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El equipo blanco se ha divorciado definitivamente de la Diosa Fortuna este año, lo que unido a los defectos futbolísticos que exhibe, le lleva a deambular por la zona templada de la tabla.
Y de nuevo, como tantas veces esta temporada, el conjunto nervionense dejó al visitante sentirse cómodo y empatar un resultado que se ponía de cara bien pronto. Un buen centro de Luna era empalado con violencia por Negredo al fondo de la red, lo que permitía soñar con tener, al menos por una vez, un plácido partido en casa ante un rival exigente. Sin embargo, este feble Sevilla no es capaz de mandar sobre prácticamente nadie en esta Liga BBVA, y en una jugada en la que el Levante maniobra con inusitada comodidad en la misma frontal nervionense, Koné termina quedándose solo para fusilar a Varas y poner la X de nuevo en el marcador. Cabe preguntarse cómo es posible que un futbolista propiedad del Sevilla, que no sólo está cedido sino que cuya ficha es abonada casi en su totalidad por el club andaluz, puede jugar dos partidos en la misma temporada contra su club de origen. El resultado es bien claro, porque además del gol tuvo dos ocasiones clarísimas más, que hubieran sido una broma macabra de haber terminado en las mallas.
Y si la primera parte acabó de forma descorazonadora para el conjunto blanco, peor iba a comenzar la segunda. Los nervionenses volvieron de la caseta con ánimo totalmente funcionarial y dieron de nuevo esa imagen, en los primeros minutos de la reanudación, que desespera al seguidor blanco. Especial mención merece en este apartado Jose Antonio Reyes, cuya absoluta desidia y falta de compromiso hicieron incluso dudar de si estaba lesionado y esperando al cambio. Ni defendía, ni acompañaba las jugadas de ataque, ni intentaba irse, ni parecía que se hubiera enterado de que estaba jugando un partido de fútbol profesional; un partido en el que su club se jugaba muchísimo, por cierto.
Aún así, algo bueno tuvo el Sevilla esta vez. El equipo intentó subir el ritmo conforme los minutos iban pasando, y lo hizo además fiel a una hoja de ruta, lo cual ya es de por sí de agradecer. Intentando rasear el balón y buscar espacios, tuvo varias opciones de gol claras; especialmente un balón sacado bajo palos in extremis por la defensa del Levante cuando el Pizjuán cantaba ya el gol. En la otra portería, Koné estuvo a punto de ganarse para siempre el título de futbolista non grato con una ocasión clarísima que fue detenida majestuosamente por Javi Varas. Sin embargo, el gol no llegaba; y sin embargo también, el destino le tenía preparada una última bufonada cruel a la parroquia sevillista. Un penalti señalado sobre Negredo en el minuto 85 hacía contener la respiración al graderío entero, receloso del factor suerte en todo lo que va de año. Y por desgracia para los blancos, los recelos resultaron fundados. Un violento disparo de Negredo fue muy bien despejado por Munúa, alejando definitivamente casi cualquier opción europea para el año venidero, habida cuenta de que la próxima visita es a un Bernabéu ardiendo en deseos de cantar el alirón cuanto antes. De esta manera, el equipo blanco se coloca en ropa de verano a falta de 4 jornadas para que finalice la liga, mientras que los levantinistas ven cada vez más cerca el sueño de pasearse por Europa por fín.
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Sevilla FC: Javi Varas (1); Cala (1)(Coke, 83 (1)), Fazio (1), Escudé (0) (Deivid (1), 44), Fernando Navarro (2); Navas (1), Medel (2), Trochowski (2), Luna (1)(Reyes (0), 53); Manu del Moral (1) y Negredo (1)..
UD Levante: Munúa (1); Javi Venta (2), Ballesteros (2), Cabral (2), Pedro López (1); Iborra (2), Xavi Torres (2) (Farinós, 77; Valdo (2)(El Zhar, 77), Barkero (1), Botelho (1)(Juanlu, 87); y Koné (1).
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