El entrenador del RCD Espanyol, Quique Sánchez Flores, ha asegurado que la victoria de este lunes ante el RC Celta (2-1) ha sido merecida, y ha destacado que sus jugadores han "corrido y peleado mucho" y que no han merecido "pasarlo tan mal" en este comienzo de temporada.
"Los jugadores estaban muy metidos, concienciados y sabían de la importancia de los puntos. Sabíamos que con estos tres puntos sumaríamos el doble que la pasada temporada y este es un aspecto muy positivo. No es el arranque soñado, pero estamos bien y hay que seguir trabajando. Creo que los chicos no merecen pasarlo tan mal. Han corrido y peleado mucho y merecíamos la victoria", señaló en rueda de prensa.
Además, el técnico madrileño explicó que el equipo hizo "un buen arranque de partido". "El primer tiempo fue bueno y hasta el minuto 15 de la segunda parte estuvimos bastantes bien, pero entonces entramos en problemas físicos. Ante un rival de tanta calidad es normal que cueste tanto sumar".
Por último, destacó que el gol visitante "ha metabolizado el partido". "Parecía más nervioso porque nos han venido muchos recuerdos del año pasado. Hemos sufrido en los minutos finales, pero se portaron bien para aguantar a un equipo tan potente como el Celta", concluyó.
La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.
Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.
El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.