El acumulado de lluvias en España desde el inicio del año hidrológico, el pasado 1 de octubre de 2023, hasta el 17 de septiembre de 2024, es un 4% superior al valor normal correspondiente para dicho periodo, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Con respecto a la semana pasada, ha perdido un punto.

En concreto, el valor medio nacional de las precipitaciones acumuladas se cifra en 640 litros por metro cuadrado (l/m2), cuando el valor normal para dicho periodo es de 617 l/m2. En la semana del 11 al 17 de septiembre, la agencia ha informado de que las precipitaciones han afectado a zonas de la cornisa cantábrica, al levante peninsular, a las islas Baleares y a las islas Canarias más occidentales; y que las cantidades más destacadas se han registrado en el litoral de Castellón, con más de 40 l/m2 acumulados; y en puntos de Cantabria y del País Vasco, donde se llegaron a superar los 60 l/m2.

Entre las precipitaciones acumuladas en observatorios principales, AEMET ha destacado los 53 l/m2 en Santander/Parayas; los 49 l/m2 en San Sebastián/Igueldo; los 41 l/m2 en Hondarribia/Malkarroa; los 39 l/m2 en el aeropuerto de Bilbao; y los 29 l/m2 en Gijón/Musel y Santander I/CMT. A su vez, el organismo estatal ha detallado que el día 18 se registraron precipitaciones en forma de tormenta en el interior de la Península y en puntos del litoral de Cataluña y de la Comunidad Valenciana, que dejaron acumulados de más de 40 l/m2 en el norte de Guadalajara y en el sur de la provincia de Teruel.

En líneas generales, las cantidades acumuladas se encuentran por encima de sus valores normales en la mitad oeste e interior de la Península, en el País Vasco, en Navarra y en la parte occidental del Pirineo junto con el norte de Aragón y de Andalucía.

Por otra parte, las cantidades acumuladas se encuentran por debajo de sus valores normales en el tercio este peninsular, la franja que recorre la mitad este de Asturias y Cantabria además de en ambos archipiélagos, sobre todo el canario. Asimismo, están especialmente bajas en una franja en el levante peninsular, que va desde Almería hasta el sur de Castellón, donde se ha registrado menos de la mitad de la precipitación respecto a su valor medio para el periodo 1991-2020.