Las autoridades impuestas por Moscú en la región de Donetsk, ubicada en el este de Ucraia pero parcialmente bajo control ruso, han denunciado este lunes que al menos seis personas han fallecido y otras casi 60 han resultado heridas en ataques de las Fuerzas Armadas ucranianas en la última semana.
Así lo ha confirmado la Defensoría del Pueblo de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD) en su canal de Telegram, donde apunta que entre los heridos hay al menos cuatro niños, y además hace balance de la situación en la región desde comienzos de año.
En total, desde comienzos de 2024, un total de 274 civiles han fallecido en el territorio, incluidos diez niños; mientras que otras 1.269 personas han resultado heridas, entre ellos 97 niños, a causa de los ataques ucranianos en la zona.
La región del Donbás, ubicada en el este de Ucrania y que comprende además la región de Lugansk, ha sido escenario de ataques desde hace una década, cuando las tropas ucranianas y milicias prorrusas iniciaron enfrentamientos que dejan desde entonces casi 9.400 muertos y más de 14.500 heridos.
La guerra en Ucrania estalló a finales de febrero de 2022, cuando el presidente de Rusia, Vladimir Putin, dio la orden de invadir su país vecino. Desde entonces Moscú ha logrado ciertas victorias y un avance territorial que le permite controlar parcialmente algunas provincias como Donetks, Lugansk, Jersón o Zaporiyia, las cuales anexó en septiembre de aquel mismo año tras un referéndum no reconocido internacionalmente.
