Yama Islamiya, rama de Hermanos Musulmanes, habla de "cobarde crimen" de la "traicionera mano del régimen sionista"
Al menos una persona, identificada como un alto cargo del partido islamista Yama Islamiya, ha muerto este martes a causa de un bombardeo ejecutado por un dron del Ejército de Israel contra un vehículo que circulaba en los alrededores de la ciudad de Damur, al sur de la capital de Líbano, Beirut. La Defensa Civil de Líbano ha indicado que los equipos de rescate han extinguido un incendio en el vehículo tras el ataque y han encontrado en su interior el cuerpo de una persona no identificada, según ha recogido la agencia estatal libanesa de noticias, NNA. Posteriormente, Yama Islamiya, rama de la organización Hermanos Musulmanes en el país, ha confirmado en un comunicado en su cuenta en Telegram que el fallecido es Husein Atui, un alto cargo de la formación, sin que por ahora el grupo se haya pronunciado al respecto. El partido ha dicho lamentar "el martirio" de Atui, al que ha descrito como "un líder académico y profesor universitario" que "ha sido asesinado por la traicionera mano del régimen sionista en un atroz bombardeo de un dron contra su vehículo cuando iba desde su casa en Bauarta a su puesto de trabajo en Beirut". "Nosotros, Yama Islamiya, condenamos este cobarde crimen y hacemos responsable del mismo al enemigo sionista. Nos preguntamos cuánto durará la injerencia de la arrogancia sionista en la seguridad de Líbano y los libaneses", ha zanjado, sin que el Ejército israelí se haya pronunciado por ahora sobre el ataque. Yama Islamiya, un grupo fundado en los años sesenta como rama libanesa de Hermanos Musulmanes, participó junto al partido-milicia chií Hezbolá y grupos palestinos armados en ataques contra Israel a raíz del conflicto desatado tras los ataques del 7 de octubre de 2023 contra territorio israelí. Los ataques, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 250 secuestrados, llevaron a Israel a lanzar una ofensiva contra Gaza, mientras que Hezbolá respondió un día después lanzando proyectiles contra Israel, abriendo otro frente y provocando una expansión del conflicto que derivó en una nueva invasión israelí de Líbano. Las partes alcanzaron en noviembre de 2024 un alto el fuego por el que tanto Israel como Hezbolá debían retirar sus efectivos del sur de Líbano, si bien el Ejército israelí ha mantenido cinco puestos en territorio de su país vecino. Además, ha ejecutado diversos bombardeos argumentando que actúa contra actividades de Hezbolá y que, por ello, no viola el alto el fuego, si bien tanto Beirut como el grupo se han mostrado críticos con estas acciones, igualmente condenadas por Naciones Unidas.
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