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Las autoridades de China han descartado este viernes cualquier "injerencia" en las elecciones de medio mandato previstas para el próximo mes de mayo en Filipinas, donde los electores elegirán la composición de la Cámara de Representantes del Parlamento. A pesar de las crecientes tensiones entre las partes y de las acusaciones vertidas contra Pekín, el Gobierno chino ha insistido en que "se rige por el principio de no interferencia en los asuntos internos de otros países". "No tenemos interés alguno en injerir en los comicios filipinos", ha aseverado el portavoz del Ministerio de Exteriores, Guo Jiakun, durante una rueda de prensa. Así ha respondido a las acusaciones vertidas por el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Filipinas, Jonathan Malaya, que indicó el jueves ante el Senado que había "indicios" de que existían "operaciones de información" respaldadas por China que buscaban interferir en los comicios. Según Malaya, para hacer llegar esas supuestas informaciones y "redirigir" a la opinión pública, China estaría utilizando las redes sociales. El guion de estos mensajes, ha sostenido, procede de Pekín, según informaciones recogidas por el diario 'The Philippine Star'.
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