El balance de víctimas a consecuencia del ataque perpetrado este lunes por el Ejército estadounidense contra tres viviendas de la capital de Yemen, Saná, ha aumentado a 16, según han informado en las últimas horas los rebeldes hutíes. El Ministerio de Sanidad vinculado a la insurgencia ha confirmado que el bombardeo del Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM) contra el distrito de Bani al Harith, ubicado en el norte de la capital yemení, ha provocado doce muertos y cuatro heridos. En un comunicado recogido por la agencia de noticias yemení SABA, el grupo islamista ha denunciado asimismo que las víctimas mortales incluyen mujeres y niños. Además, otro ataque lanzado este lunes contra un centro de detención de inmigrantes en la región de Saada, en el noroeste del país árabe, se ha saldado con cerca de 70 migrantes muertos, La televisión Al Masirá, controlada por los hutíes, ha publicado imágenes explícitas de las víctimas del bombardeo y varios cuerpos cubiertos de escombros en un edificio destruido en el ataque. Previamente, el Mando Central había informado de que había atacado más de 800 objetivos en Yemen desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó intensificar la campaña contra los hutíes, el pasado 15 de marzo. En estos ataques habrían muerto "cientos de combatientes hutíes y varios líderes hutíes".
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