MADRID, 15 (SERVIMEDIA)
BBVA propondrá a sus accionistas en la Junta general convocada para el próximo día 20 de abril la posibilidad de amortizar hasta el 10% del capital social si implementa finalmente la recompra anunciada de títulos cuando cierre la venta de la filial de Estados Unidos a la entidad de Pensilvania PNC.
Según informó este lunes el banco, la operación afectaría a unos 667 millones de acciones y con su amortización mejoraría la retribución al inversor. Con la propuesta en la Junta busca recabar el permiso de los accionistas para que su Consejo de Administración pueda o no ejecutar la recompra y posterior amortización, “en una o varias veces”.
BBVA precisó que su ejecución está supeditada, en cualquier caso, al cierre de la venta de la filial en Estados Unidos, que se espera para mediados de año, y siempre sujeto a las condiciones de mercado y a que se obtengan las autorizaciones necesarias de los supervisores.
La entidad de Pensilvania PNC le pagará 11.600 millones de dólares (unos 9.700 millones de euros) por su negocio de Estados Unidos, totalmente en efectivo. Una factura que engordará su colchón de capital en 8.500 millones de euros, con los que en un inicio intentó negociar una fusión con Sabadell que resultó fallida y abrió además la puerta a mejorar la retribución al accionista.
En la presentación de resultados correspondientes al 2020, su presidente, Carlos Torres, y el consejero delegado, Onur Genç, ya apuntaron que la intención del grupo es destinar 3.000 millones de euros a recomprar el 10% de sus propias acciones y amortizarlas.
La operación sería complementaria al dividendo de 5,9 céntimos brutos por acción que prevé pagar el 29 de abril con cargo al resultado de 2020 y que también llevará a la Junta General. Su abono implica un 15% del beneficio obtenido el pasado año y se sitúa así en el límite máximo permitido por el Banco Central Europeo (BCE).
Con la recompra y amortización de acciones avanzaría en su intención de recuperar su política de retribución al accionista con un 'pay out' de entre el 35% y el 40%. Para ello, el banco dijo que propondrá a la Junta que la cantidad a repartir respecto al 2021 y como primer dividendo en efectivo sea de un importe máximo del 35% del beneficio del Grupo del primer semestre, sin incluir extraordinarios.
Este primer dividendo de 2021, que tentativamente se pagaría en octubre, estará sujeto a que se levanten las restricciones regulatorias respecto a la remuneración a los accionistas, que actualmente están en vigor hasta septiembre.
En la Junta, que se celebrará por medios exclusivamente telemáticos, el banco propondrá además reelegir como consejeros a José Miguel Andrés, Jaime Caruana, Belén Garijo, José Maldonado, Ana Peralta, Juan Pi y Jan Verplancke.
Según el banco, su Consejo cuenta con dos tercios de consejeros independientes y combina perfiles “con un profundo conocimiento y experiencia dilatada en áreas clave” tales como banca, estrategia, macroeconomía, sostenibilidad, innovación, tecnología, entre otros. Además un 40% son miembros de nacionalidad extranjera y un tercio de mujeres en su máximo órgano de decisión. El banco tiene como objetivo, de acuerdo con la política aprobada por el Consejo, contar con al menos un 40% de mujeres en el Consejo antes de que finalice 2022.
El orden del día de la Junta incluye la preceptiva aprobación de las cuentas anuales, del informe de gestión y del estado de información no financiera del 2020, tanto de BBVA como del Grupo consolidado; la aprobación del resultado y la gestión social y de su política de remuneraciones para los consejeros durante el trienio 2021, 2022 y 2023.
También propondrá la reelección de KPMG para la auditoría del ejercicio 2021 y la aprobación de un nivel máximo de remuneración variable de hasta el 200% de la remuneración fija para el colectivo de empleados cuya actividad incide significativamente en el perfil de riesgo del banco (los denominados ‘risk takers’).
Por otro lado, pedirá facultad al Consejo para emitir valores convertibles en acciones (AT1 o CoCos) durante un plazo de cinco años hasta un importe máximo de 8.000 millones de euros, que sirva para atender las necesidades de emisión de este tipo de instrumentos que pueda tener el banco durante dicho horizonte temporal.
Por último, proyecta actualizar sus Estatutos Sociales y el reglamento de la Junta General de Accionistas para que puedan ser celebradas de manera presencial, de forma totalmente telemática o en formato híbrido.
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