MADRID/BARCELONA, 15 (SERVIMEDIA)
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, aseguró este sábado que si Sumar no formase parte del acuerdo de Gobierno y ella no ostentase el cargo en estos momentos no se estaría hablando de la reducción de la jornada laboral en España ni se habría aprobado en el Consejo de Ministros.
Díaz realizó estas declaraciones durante un acto sobre la reducción de jornada organizado por Sumar celebrado en la localidad barcelonesa de Viladecans, donde afirmó que han cambiado el paradigma a la hora de resolver los conflictos en materia laboral.
"Hemos demostrado que la devaluación salarial no era el camino, subiendo el SMI hemos dado estabilidad y reducido la desigualdad", explicó Díaz, quien puso en valor mecanismos como los Ertes que sirvieron para mantener el empleo durante la pandemia.
Asimismo, afirmó que la ampliación de derechos sirve para "dar esperanza" a la ciudadanía en un contexto en el que el mundo se ve amenazado por el auge de la extrema derecha.
Respecto a la reducción de jornada, indicó que no hay nada "más ineficiente" que las horas extra impagadas. "Nadie habla de que ninguna de estas horas no cotizan a Hacienda", lamentó Díaz, quien también incidió en el derecho a la desconexión que poseen los trabajadores.
Además, afirmó que los trabajadores a tiempo parcial no van a perder derechos y amenazó a las empresas que realicen infracciones respecto a esta medida. "A partir de ahora las infracciones en materia de jornada se individualizan", comentó la vicepresidenta, quien aseguró que hasta ahora a las empresas les había salido "muy barato" incumplir la jornada laboral de sus trabajadores.
LA MEJOR POLÍTICA DE PROMOCIÓN
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, aseguró que la reducción de jornada es "la mejor medida de promoción cultural que podemos implantar". "Cuando le preguntamos a la gente porque no lee más la mayoría declaran que es por falta de tiempo, la cultura no puede ser un lujo accesible solamente para aquellos que tienen tiempo", lamentó Urtasun, quien afirmó sentirse "muy orgulloso" de estar planteando estas medidas en un contexto de auge de las fuerzas reaccionarias.
En la misma línea, indicó que es "mentira" que las jornadas más largas garanticen una mayor productividad y afirmó que en pleno Siglo XXI no puede ser que tengamos una jornada igual que en el siglo XXI.
Por su parte, la portavoz adjunta de Sumar en el Congreso, Aina Vidal, utilizó un tono mucho más duro y tildó de "cínicos, machistas, racistas y autoritarios", tanto a Foment como a la CEOE por oponerse a esta reducción de jornada. Vidal, quien aseguró que existe un "fraude masivo" de horas no pagadas, lamentó que se dude de la viabilidad de la reducción de jornada mientras la banca ha acumulado 31.000 millones de beneficios en el último ejercicio.
Por último, aseguró que la reducción de jornada es un derecho "íntimamente ligado" al desarrollo efectivo de la democracia.
|