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Bajo la escandalosa lluvia, que, se derramaba a raudales desde los cielos y en casa de Melania, la mamá, Josefina, Ma. Paula, Renata Lucía, el amigo y empleada, todos en el comedor redondo de madera almorzaban. La empleada Remigia servía. Era toda una algarabía familiar. Y desde el comedor una vez todos sentados hicieron su teatro familiar gesticulando.
Hace unos meses llegó a mis manos la novela de mi amigo José Luis Ortiz, quizás la crítica literaria que voy a hacer parezca poco objetiva por la amistad que me une a José Luis, pero os puedo asegurar que, si estoy escribiendo sobre ella es porque me encantó y me recordó lo complicada que se puede volver la vida y lo sencillo que parece descrita desde la pluma de su autor.
En todas las obras se dilucidan realidades de la vida, combinadas con ideas, imaginación, y pensamientos propios del autor. Narra la tragedia que sucedió en diversas épocas, ante la moderna burocratización de una sociedad sin alma. Pone la mirada de sus letras en la llaga cuyo dolor sangra, escritas en estas páginas, y en un tiempo que no necesita presentación.
El vecino Filiberto esa noche sonó y se despertó gritando, te amo, te amo, y era tan fuerte el grito, que él mismo logró sacarse de su sueño profundo y mágico y una vez despierto pensó: si alguien, escuchó mis gritos de seguro estará pensando está loco ese. Pero, que importa lo que piensen de notable imaginación.
Leo con calma, pese a sentir el tiempo en los talones, La sal del olvido, novela de Yasmina Khadra que me va envolviendo en la trama que interpretan unos personajes que ya no tienen otra razón de ser que la de héroes perdedores. Libro lleno de emociones, hurga en el alma de su personaje, para mostrar que éste no acepta la derrota
El Arcoíris de mis deseos insaciables va a presentar como una novela de suspense la sorpresa viva de su misterio. Conoceremos el abigarrado París de los años veinte, el amor libre y la decepción del silencio. El amor puro y a la vez apasionado entre Letot, joven aristócrata de buena familia, y la bella Francesca, actriz en ciernes. Su encuentro, sus miradas y el secreto de ella. ¡Un alma femenina atrapada en un cuerpo masculino!
La escritora Iris Morata (Barcelona, 1982) es mujer de contrastes. Dejó atrás el mundo de la moda, con el bullicio y el ajetreo como compañeros, para embarcarse en una aventura tan solitaria y personal como es la escritura. Su primera novela, Inolvidar, está llena de personajes y situaciones donde lo que pudiera parecer inaceptable nos mueve a una empatía tal vez insospechada.
La máxima autoridad del Tribunal Superior de Justicia de una Comunidad Autónoma española de gran peso político y económico organiza una trama mafiosa cuya labor consiste en «vaporizar» por encargo a personas concretas, quienes suponen un problema para alguien también concreto, o incluso para corporaciones sociales como cierto partido político; y como el cliente siempre lleva razón, mientras pague, se le da gusto.
Difícilmente podría esperar al iniciar la lectura de esta novela, que un niño solitario de corta edad que andaba de un lugar a otro perdido en el aeropuerto Hamburgo, pudiese llegar a situarse como uno de los primeros protagonistas al comienzo de tan envolvente historia literaria.
Es imposible pararse a reflexionar y desgranar esta obra y dejar de lado algo tan obvio como el gran éxito de ventas que fue y que es: millones de ejemplares vendidos, traducido a casi cuarenta idiomas, germen de clubes de lectura y halagado por el boca-oreja; tengamos en cuenta que algo tendrá el agua cuando la bendicen y respetemos el criterio de los lectores antes de vilipendiar con ligereza.
Editado por Temas de hoy, el libro que pesa 355 gramos y contiene 47.705 palabras, aunque en un principio debió tener muchas más. Es la historia de la peor familia del mundo y del peor recuerdo de una amistad entre dos adolescentes sin futuro. Entre las páginas del libro se cuelan personajes de la Transición (Felipe González), de la farándula (Lola Flores), así como relevantes momentos sociales (las privatizaciones o la herencia de los GAL).
Los juegos de casino han sido una de las formas de entretenimiento más demandadas durante años. En el pasado, aquellos aficionados del sector tenían que ir hasta uno de los establecimientos de juego para disfrutar de ellos. Aunque con la extensión de la tecnología y el uso de la red Internet, han sabido adaptarse a los nuevos tiempos, ofreciendo versiones digitales disponibles desde cualquier ordenador, portátil, tableta e incluso móvil; desde cualquier momento y lugar.
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