El 6 de febrero del corriente año publicamos un comentario titulado “España no debería ser representada por quienes la odian”, que trataba sobre la conveniencia o inconveniencia de que personajes como el futbolista del Barcelona, declarado separatista, Gerard Piqué, presente habitualmente en los partidos de la selección nacional, y este muchacho que parece que se ha hecho famoso por su participación en el concurso de la OT que ha emitido la TV1, la televisión oficial del Estado; un sujeto que bajo el aspecto de un inocente aspirante a la fama y con una perenne sonrisa de timidez, tal y como ya anunciábamos en el citado comentario, no parece que sea tan “inofensivo” según se viene desprendiendo de las noticas que circulan sobre su manera de pensar y los amigos con los que parece que se siente a gusto y con los que comparte ideas, tales como el periodista, conocido por su fama de antisistema, Jordi Évole, y el no menos conocido, Iñigo Errejón, el desterrado de los primeros puestos de Podemos por su amigo y, sin embargo, verdugo inmisericorde, Pablo Iglesias que, después de vencerle en su confrontación dentro de su partido, se apresuró a cortarle las alas para que no le pudiera perjudicar nunca jamás.
Hasta aquí no sería nada nuevo ya que, cuando se trata de alcanzar la fama todos los trucos, incluso organizadas historias románticas, pueden resultar medios eficaces para tomar el pelo a la audiencia propicia, a pesar de que todos nos consideramos muy listos, de tragarse cualquier meliflua fábula de amor, hábilmente pergeñada por los promotores del evento para causar impacto y atraer a los espectadores, especialmente el público femenino que, a pesar de sus reivindicaciones pidiendo la equiparación con los hombres, todavía no han sido capaces de superar esta ñoñez sentimental que las hace soñar en príncipes azules y cuentos de hadas. No obstante, quizá sea por los años que ya llevamos viviendo en esta sociedad tan cambiante y tan dada a dejarse llevar por las modas, sean en la vestimenta, sean en la música o el arte o sean en las ideas políticas, que ya tenemos una cierta facilidad en notar el tufillo a amaño, la veteranía para advertir el doble fondo que se esconde detrás de una cara amable o la hipocresía del que se sabe vender como un alma cándida y sin malicia aunque, en realidad, si se bucea en sus más recónditos pensamientos, es fácil encontrar aquellos sedimentos de rencor, de fanatismo o de traición hacia el país al que debiera estar agradecido, precisamente porque, gracias a él, a que es una democracia y a que se ha preocupado para que todo español tenga sus oportunidades de demostrar sus cualidades él, en estos momentos de su juventud, se encuentra en una posición óptima para encauzar su porvenir.
Pero, incluso la lepra, por mucho que se intente ocultarla, acaba por ser imposible de disimular cuando el mal avanza y sus terribles consecuencias se empiezan a manifestar, sin que ya se posible intentar ocultarla. Es obvio que la fama se ha de saber administrar, que antes de empezar a contar con el triunfo se ha de saber esperar la oportunidad y no pensar que, cuando uno se encumbra en la cima de la montaña, ya no puede haber nadie que sea capaz de hacerle bajar de ella, si antes no ha sabido tomar las medidas oportunas para afianzarse en el lugar y tomar las precauciones de que quienes merezcan su confianza no sean los primeros interesados en que se caiga al precipicio. El dejar traslucir sus verdaderos sentimientos separatistas, el tuitearse con sujetos de tan reconocidas ideas comunistas bolivarianos, el demostrar formar parte de un grupo de individuos contrarios al régimen y de ideas antisistema, no es un muestra de inteligencia si, como parece que va a ocurrir, va a representar a España, nada más y nada menos que a la centenaria España, heredera de tan importantes gestas y gloriosas acciones, a la que tantos veneramos, en el festival europeo de Eurovisión que va a tener lugar en nuestra vecina Portugal en su próxima edición.
Ya expresamos, en su día, nuestra idea de que enviar a sujetos como este chico, de conocidas ideas contrarias a España, partidario de aquellos que se han declarado dispuestos a separarse de ella y de emplear todos los medios a su alcance para luchar en contra del Estado español aunque, para ello, tengan que utilizar el engaño, la mentira, la calumnia y las injurias para desacreditarlo ante el resto de naciones, algo que el señor Puigdemont, un traidor merecedor de pasar el resto de su vida detrás de los barrotes de una celda, está haciendo con plena impunidad y con la aquiescencia de algunos países europeos que demuestran con ello la endeblez de esta alianza que forma la CE, cuyo Parlamento parece dispuesto a hacer la vista gorda, en lugar de apercibir a todos aquellos que tan remilgosos se han mostrado a la hora de entregar a unos desleales al país que los reclama como responsables de delitos de máxima gravedad, como son todo este grupo de fugados de la Justicia, que parece que han encontrado Jauja en Bélgica y en Suiza que, aunque no forme parte de la UE, debiera de ser más cuidadosa con la gentuza que acoge sin que, por lo visto, a sus autoridades les preocupe lo más mínimo el albergar, aunque fuere transitoriamente, a personajes de la catadura de los que los han visitado, para insultar y denostar a su nación desde los foros que los han recibido encantados. Si la UE no es capaz de garantizar la seguridad jurídica y las leyes vigentes en las naciones que forman parte de ella, va a resultar muy difícil que exista el consenso preciso para que, como ha pasado con el Reino Unido, haya otros países dispuesto a imitarlo, se produzca una diáspora que acabe, de un plumazo, con todo el proyecto.
Es evidente que los de Podemos han encontrado terreno propicio en algunos miembros de la OT para apoyarse en ellos con el objetivo de hacer propaganda de sus ideas proletarias y, de paso, dar el espaldarazo a las intenciones separatistas de Cataluña. Errejón se expresó con un entusiasmo harto sospechoso cuando contestó a una pregunta de Évole, “¿Cuándo nos hubiéramos imaginado que, en España, iba a triunfar un reality show en el que la gente normaliza la diversidad sexual y la diversidad lingüística en nuestro país?” Pero, señores, ¿ es éste el fin que se propusieron los que quisieron reproducir el éxito de OT1 o más bien, rescatar aquel exitoso concurso para sacarle de nuevo jugo a una idea que, entonces, tuvo mucho éxito? No contento con haberse apropiado de lo que, para él, era la base fundamental del concurso, insiste: “ El otro día Jordi Évole me preguntaba sobre la importancia de OT: Alfred, Amaya y sus compañeros ( a todos los pone en el mismo puchero) son referente de un sentido común de la época y de una generación que quiere, cooperación, diversidad, solidaridad e igualdad ( y por ello se disputan como fieras el conseguir hacerse con el triunfo) Son reflejo del país que viene”
Claro que Alfred, deslumbrado por haber merecido la atención de personajes de tanto relumbrón mediático, no se quedó corto: “Muchas gracias Errejón (el tuteo demuestra la camaradería que se establece entre ambos interlocutores) Para mí y para muchos otros jóvenes sería un honor hablar con Jordi Évole ( el clásico periodista al que le importan poco los métodos, los medios, la ética periodística y los procedimientos, cuando se trata de sacar provecho de una ocasión o de conseguir escandalizar a su audiencia, algo que desde luego le ha proporcionado la fama que, con toda seguridad, no hubiera conseguido si se hubiera dedicado a ejercer su profesión respetando las reglas del juego) y contigo sobre todos estos temas ( seguramente el muchacho es un experto en economía, finanzas, deuda pública, temas sociales y pensiones, de lo que se puede deducir lo que sería su “valiosa colaboración” en solucionar los problemas nacionales) Muchos artistas en este país han sido silenciados y juzgados por sus creaciones, gran parte durante la dictadura ( ¿qué sabrá este pelagatos de lo que sucedió durante la dictadura, salvo lo que le hayan explicado aquellos, tan ignorantes como él, que le permita pontificar sobre aquella época que los de la Memoria Histórica, otros ignorantes, no hayan tergiversado y maleado de modo que la historia que hoy se estudia en las aulas, no es más que un documento apócrifo de toda aquella época) La historia se repite…. Al igual que con las refugiadas y los refugiados (ya ha aprendido del feminismo vigente) sirios, la historia también se repite (se repetirá en otros aspectos pero una masa de desplazados invadiendo Europa quizá no se haya visto nunca). Pues…¿Cuántos españoles fueron refugiados durante la guerra civil ( Serían los que durante la guerra tuvieron que huir de la España republicana, amenazados de muerte por las Juventudes Socialistas, la FAI, la CNT y los chequistas rusos que vinieron a nuestra nación para enseñar a torturar, como lo hacía la KGB en la URRS)¿Hablamos sobre otros países europeos y sus guerras ( y ya puestos porque no hablamos de los países ocupados, detrás del Telón de Acero, por los soviéticos del “padrecito Stalin, donde el Estado los tenía vigilados, para que ninguno pudiera buscar un ápice de democracia)
Y este sujeto, que se ha venido tuiteando con ambos personajes frecuentemente, con similares misivas, es la persona, la única que se ve han tenido a mano (no quiero hablar de la joven porque no conozco su forma de pensar, aunque visto lo visto, no me extrañaría que compartiera su ideología de su compañero) los jueces y organizadores del concurso y de la elección de quienes deberían representar a España en Eurovisión. Claro que, conociendo lo que se cuece dentro de esta cueva de progres que integran el organismo de la TV, no nos debe extrañar que, empezando por los profesores de las diversas disciplinas que se imparten en la OT y siguiendo por toda la retahíla de empleados, presentadores etc. el ambiente que se respira en la cadena nacional, contrariamente a lo que desde los partidos de la oposición se sustenta, no puede ser más favorable a las izquierdas; algo que queda patente si uno observa la insistencia, la duración y los comentarios que los presentadores de los programas informativos se permiten hacer en los casos de noticias que van en contra de la derecha o de los partidos que sustentan tales ideas.
O así es como, señores, desde la óptica de un ciudadano de a pie, tenemos que reafirmarnos en nuestra repulsa a que España deba ser representada por uno de aquellos que, públicamente, se han mostrado contrarios a su unidad y que se muestran propicios a relacionarse a aquellos grupos a los que no les importa ir en contra de la Constitución española si con ello consiguen favorecer a quienes tiene por objetivo acabar con la democracia de nuestra nación.
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