Un estudio revela que entre 2011 y 2017 se produjeron en el mundo 259 muertes por selfies, cinco veces más que las 50 muertes por ataques de tiburón. España es el segundo país de Europa y el cuarto del mundo en muerte por selfies, que para las estadísticas serias nos superan todos los países pero a la hora de hacer tonterías siempre estamos ganando medallas.
Hoy en día vas a cualquier evento, desde un concierto o partido de fútbol, y descubres que las personas están más preocupadas de fotografiar el instante para la posteridad que disfrutar ese momento. También ocurre en las discotecas, donde te encuentras que esas mismas personas tienen el cubata en una mano y en la otra el móvil para hacer fotos, y cuya logística impide bailar pegados o simplemente meterse mano.
Aunque este fenómeno comenzó mucho antes, Instagram lo ha potenciado dando a los usuarios la oportunidad de engancharse, para seguirse virtualmente y coleccionar likes. De hecho se ha producido algo curioso, y es que con el paso de los años muchas mujeres han perdido la vergüenza y han pasado de tapar con recato sus pezones a entrar en una lucha de originalidad encarnizada por mostrarlos saltando la censura en esta red social, entre otras cosas por el hecho de que a los hombres se les permite mostrarlos y a ellas no.
En 1997 Lady Di murió en un accidente de tráfico, pero la realidad es que lo hizo por culpa de unos paparazzi que buscaban su fotografía con Dodi Al-Fayed. Ahora en el 2019 el morbo de la fotografía periodística sigue intacto aunque más civilizado, y en esta ocasión consistía en captar juntos a Albert Rivera y Malú, hecho que ya se ha producido a la salida de un hospital, un lugar romántico como pocos para una primera fotografía oficial de pareja.
Pero la mejor fotografía está por llegar. Es como cuando todo el mundo sabe que ese chico y esa chica están juntos pero por indecisión de una parte o decisión conjunta, no se hacen la foto por miedos e inseguridades al compromiso y la crítica de saber que una vez hecha se oficializa una relación para la historia. Y eso va a ocurrir en breve en la Comunidad de Madrid y la de Murcia entre C’s y Vox, entre Albert Rivera y Santiago Abascal, dos partidos y personas que se odian tanto como se quieren, que se interesan y se desean al grito y susurro de ‘Viva España’ y una encantadora adicción a las fotografías.
|