Lamentablemente para nadie que viva, o este pendiente de lo que sucede, en Chile es una sorpresa lo que acaba de suceder. El día 13 de Mayo, el ministro de salud Sr Jaime Mañalich salió, una vez más, mintiendo al país, dijo que se declaraba Cuarentena general en Santiago debido al gran número de contagios del Covid19 había una catástrofe que nadie podía prevenir. Esto en concreto es MENTIRA señor ministro y existen muchas pruebas de ello. La misma presidenta del Colegio Médico de Chile, Izkia Siches, el día 20 de Marzo público un Tw donde le decía al gobierno del país que era urgente decretar la Cuarentena en Santiago o se provocaría una gran catástrofe. Por otro lado una serie de alcalde, a los cuales el gobierno les oculta las cifras de contagiados y muertos en sus municipios con lo cual su margen de maniobras se ve muy limitado, encabezados por el edil de Recoleta Daniel Jadue, llevan meses advirtiendo de lo que pasaría y exigiéndole a las autoridades que se decretara Cuarentena en toda la región metropolitana. Nadie hizo caso, es más, las autoridades de manera socarrona y burlesca decían que una cuarentena no era necesaria y que estaban preparados para atender a miles de pacientes sin que colapsara el sistema.
Desde el 18 de Octubre del 2019 el pueblo chileno vive un completo abandono por parte de un gobierno absolutamente dictatorial. En esa fecha la gente harta de los abusos por parte de sus gobernantes y autoridades, sumado a la gran desigualdad existente en el país, salió a las calles a exigir sus derechos, a reclamar y a luchar por el cumplimiento de ellos y a decir basta. La gente perdió el miedo a un gobierno injusto y lleno de privilegios, se cansó de una policía corrupta llena de ladrones y drogadictos, muchos son los videos donde se ve a carabineros saqueando comercios, usando violencia excesiva contra manifestantes y consumiendo drogas. Todo esto resultó un polvorín que reventó.
Torturas, violaciones y agresiones sexuales, daños oculares con pedida de visión, al día 29 de enero de este año el número superaba los 400, presos sin fecha de juicio ni cargos en su contra, allanamientos ilegales, secuestros con víctimas que aparecen misteriosamente muertas sin que nadie se haga responsable de nada, son algunas de las lindezas que comete de manera impune la policía chilena. Actúan tal como hiciera en época del asesino dictador Pinochet.
El presidente de Chile, Sr Sebastián Piñera, es un tipo que creció bajo el alero y la protección del Dictador, a su haber tiene la quiebra del banco de Talca en los años 80 y entonces su mentor lo saco a Estados Unidos, de allí de forma misteriosa volvió transformado en un gran hombre de negocios que se transformó en un multimillonario sin escrúpulos.
El ministro de salud, Jaime Mañalich, es un hombre mentiroso y siniestro, fue apartado del ejercicio de la medicina por mala praxis, en el anterior mandato de Piñera este señor ocupo la misma cartera de gobierno y dentro de sus grandes actuaciones se encuentra el destruir las listas de espera para así rebajar el número de usuarios de las mismas. Una persona de gran ética y moral. Estos dos seres, Piñera y Mañalich, ahora son y serán los únicos culpables del gran genocidio que sufrirá Chile, debido a su inoperancia e inutilidad, no viene de recibo que se intenten escudar intentando convencer a la gente de que lo sucediendo con el Coronavirus era imprevisible, no señores se les estaba advirtiendo desde diferentes estamentos y organizaciones y no quisieron hacer NADA, no les importó que el pueblo se contagiara, pero si se preocuparon de hacer negocio con el alquiler del Espacio Riesco, millones regalados a un particular familiar del presidente pudiendo exigir a las clínicas privadas, mediante decreto, que atendieran a enfermos que fueran derivados desde los hospitales públicos, esto se ha hecho en países como España por ejemplo. Tampoco se les ha olvidado comprar insumos sanitarios a la clínica Las Condes, empresa a la cual está ligado el sr ministro. Robos, engaños, estafas y descaro absoluto es lo que rodea al gobierno chileno, además de abusos, torturas, asesinatos, protección a narcos y pleitesía a la delincuencia organizada, de cual más de un policía chileno forma parte. No sé lo que espera la comunidad internacional para actuar y defender al pueblo chileno del infierno en el que vive por culpa del señor presidente Piñera y sus cómplices ministros, políticos, asesores y empresarios de la derecha más reaccionaria de Chile.
|