Gracias por sus recientes correos electrónicos sobre el Mes de la Historia Ibérica y Latinoamericana, o como lo han bautizado, Mes Amigo.
Estoy encantado de apoyar esta celebración de la rica cultura, historia e idiomas de una comunidad increíblemente importante. El Reino Unido tiene una larga historia de asociación con esta región del mundo, con nuestros países compartiendo valores importantes, sobre todo compromiso con la democracia y las libertades fundamentales.
El Mes Amigo de este año comienza marcando dos aniversarios muy importantes: 500 años desde la primera circunnavegación del mundo y el bicentenario de la independencia de Brasil. Esperemos que esto comience una serie de celebraciones muy emocionantes, con suerte tan jubilosas como el reciente Festival Latinoamericano en Finsbury Park.
Cuando era alcalde de Londres, supervisé las celebraciones de los bicentenarios de la independencia de Bolivia, Ecuador, Argentina, Colombia, México, Chile, Venezuela, Paraguay y América Central, celebrando la primera recepción para cientos de líderes y embajadores de la comunidad española y portuguesa para conmemorar esas fechas. Como Primer Ministro, estoy muy orgulloso de ver vibrantes comunidades latinas, ibéricas, hispanas, lusófonas y nativas americanas en el Reino Unido, donde son totalmente bienvenidas.
Les deseo la mejor de las suertes con todas las próximas celebraciones del Mes del Amigo. Gracias, una vez más, por escribir.
En una era donde la información fluye rápidamente y la conectividad es parte de nuestra vida cotidiana, la privacidad de los datos personales se ha convertido en un tema crucial. En particular, el acoso telefónico representa uno de los efectos más evidentes y molestos, de la falta de control sobre nuestra información personal.
Pedro Sánchez y sus disciplinados ministros han estado durante una larga temporada enfangando los escaños y pasillos del Congreso, con una lluvia de insultos, mentiras y hasta vulgares gestos hacia la oposición parlamentaria. Lo que ellos no podían imaginar es que un “fango real” iba a dejar un reguero de destrucción y muerte en la región de Valencia. El “fango” de su discurso se ha convertido en su propia pesadilla.
«Hay Estado porque el Rey no se fue de Paiporta», decía el diario ABC. No quiero imaginar qué hubieran pensado en el extranjero si toda la comitiva que acudió a Paiporta hubiera salido corriendo y demostrado la misma cobardía que Pedro Sánchez. Seguramente, hoy sería otra la situación, salvo el encastillamiento del presidente, que seguiría abrasándose en su sillón con tal de no salir de Moncloa.