En 1943 fue creada la palabra “desnazificación” por los estadounidenses, quienes ya por entonces pensaron en modificar la legislación alemana para llevarla a cabo luego de concluida la guerra. La impopularidad del programa y el desinterés creciente de los aliados fueron diluyendo los programas a partir de 1946, hasta su definitiva abolición en 1951. La oposición del mismo gobierno alemán de Konrad Adenauer certificó su fin.
El 4 de junio de 1946 asumió por primera vez Perón el gobierno en Argentina, tras acuñar el exitoso slogan “Braden o Perón”. Fue uno de los más resonantes triunfos contra el intervencionismo norteamericano de los que se tenga noticias en América Latina.
Solo faltaban dos días para conmemorar el segundo aniversario del día D, la más grande operación militar de la Historia que significó el principio del fin de la guerra en Europa, y aún no había pasado un mes desde el primer aniversario de la rendición nazi en mayo de 1945.
En la primera quincena de julio de 1945, el caudillo de España por la gracia de Dios Francisco Franco, se había apresurado a destituir a sus ministros afectos al Eje, mientras los vencedores se reunían en Potsdam. Allí Churchill y Truman desoyeron con facilidad las advertencias de Stalin sobre la grave amenaza que representaba el dictador español para Europa.
Dos meses antes, en mayo de 1945, los organizadores universitarios de un festejo por la victoria aliada habían sido arrestados en Asunción, para dejar en claro las simpatías del gobierno militar que entonces seguiría gobernando en Paraguay.
A pesar de la rendición de la Alemania Nazi en mayo de 1945, y del invicto Japón imperial en agosto del mismo año, en Paraguay los dueños del poder no se habían dado por enterados del triunfo de las democracias.
Uno de los protagonistas centrales de la “nazificaciòn” de aquel gobierno paraguayo de junio de 1946, Victoriano Benítez Vera, asistía por esas fechas a un acto con Perón en el Teatro Colón de Buenos Aires. Acababa de asumir el líder justicialista su primera presidencia, cuando Benítez se enteró de los preocupantes sucesos que acaecían en Asunción y solicitó a Perón un avión para viajar de Buenos Aires a Formosa.
El embajador de Estados Unidos en Paraguay, Willard L. Beaulac, informaría el 14 de junio de 1946 a su gobierno que los referentes nazis intentaron resistir pero quedaron fuera del gobierno. Citaba como fuente al presidente paraguayo Higinio Morínigo que le había llamado para narrarle los hechos "sin que se le pregunte".
El proceso de desnazificación en el Paraguay también resultó impopular y breve: duró entre junio de 1946 y enero de 1947. No resultó entre otros motivos porque la guerra fría ya se había iniciado para esas fechas, y la más convincente causa era el petróleo iraní.
Intentar borrar consecuencias nefastas de una educación y cultura sobre personas o instituciones no es tarea breve ni fácil, mucho menos aún cuando los propios intereses son el primer obstáculo y toda causa hija de la necesidad. LAW
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