El gran gurú de la Izquierda, el padre espiritual de Pablo Iglesias y sus adláteres, Julio Anguita, aunque siga teniendo su peso específico en la misma y sea un referente ideológico para los comunistas, por el pacto de Izquierda Unida con Podemos ha pasado a ocupar un segundo plano, pues en esta unión la primera ha sido absorbida por la segunda ya que el lema con el que van a concurrir a las próximas elecciones es UNIDOS PODEMOS.
Yo me pregunto ¿quienes son los Unidos, cuando en realidad Izquierda Unida, ha sido engullida por Podemos? Al perder su nombre ha dejado atrás su propia esencia, pues Platón en su Crátilo manifiesta que los nombres no son el resultado ni de la casualidad ni de la arbitrariedad, sino símbolos de la esencia nombrada. En una palabra, que el nombre lleva implícita e indica la naturaleza de lo que es nominado con la palabra que se utilice para ello. Esta teoría influirá decisivamente en los grandes estructuralistas suizos y franceses Ferdinand de Saussure y Roland Bartehes.
No me atrevo a tanto como decir que Izquierda Unida ha perdido su personalidad, pero sí que, al ser absorbida por podemos, se ha conversito en un apéndice de este partido del que terminará siendo una marioneta.
Julio, el de “Programa, Programa” ha defendido una candidatura conjunta de mareas, movimientos sociales y políticos, o sea un totum revolutum o revoltillo, en el que, al confluir distintas ideologías, pensamientos y formas de entender la política puede terminar, como los muñecos de guiñol, a escobazos.
Dicen que fue tanta la emoción de Pablo Iglesias, al sentirse acogido por Julio Anguita, que los ojos se la llenaron de lágrimas.
Afirman que los cocodrilos cuando tragan una gran pieza, al abrir tanto la boca para devorarla, se le saltan las lágrimas ¿serían éstas lágrimas las que derramó Pablo Iglesias al sentir que había deglutido a Izquierda Unida?
Por ello me pregunto que qué clase de gobierno nos ofrecerían a los españoles, si es que triunfasen en las elecciones.
La Historia nos demuestra que en los países en los que se ha implantado un régimen comunista, éste sólo ha servido para acumular calamidades, miseria, pobreza y humillación del pueblo al que han sometido.
El primer y último fin del comunismo es asaltar el poder por medio de la revolución. Pablo Iglesias, ya lo ha manifestado con su famosa frase. “Vamos a asaltar el cielo”. Como opino que no es creyente, el único cielo que pretenderá conquistar será el del poder. Ciertamente no con una revolución cruenta como en los otros países en los que se ha impuesto éste, -no es momento de ello-, pero sí con una revolución intelectual en la que se acaben con todos los principios y valores que han constituido los pilares de la civilización occidental.
¿Acaso pretenden implantar un régimen como el de la Rusia comunista en la que millones de personas fueron exterminadas por los más fútiles motivos?
En ella, el pueblo, la clase obrera, en nombre de la cual se impusieron los comunistas, fue humillado, vejado, pasó calamidades sin cuento, hambres…, pero eso sí en nombre de la revolución de cuyos beneficios sólo disfrutaron los dirigentes.
El final de la Rusia soviética lo hemos vivido y no ha podido ser más patente su estrepitoso fracaso.
¿Quieren someternos a un régimen dictatorial, como el de Cuba, Corea del Norte o Venezuela? Ganas no le faltan, ya que en varias ocasiones han alabado las “bondades” de los mismos y no han sido capaces de tener un reproche hacia sus gobernantes por las desgracias que están pasando los habitantes de dichos países.
Venezuela, posiblemente sea un lugar de los más favorecidos por la Naturaleza, pues sus riquezas son innumerables, bien, pues pueblo carece hasta de papel higiénico.
A Corea del Norte se le puede aplicar la misma medida.
Amigas mías que han ido a Cuba me han contado que llevaban hilo, agujas y adminículos para que las mujeres pudiesen remendar sus pobres ropas, ya que en los mercados (?) no los había.
Y ahora la mayor contradicción que se pueda dar dentro de la doctrina comunista. Ésta, por definición, es enemiga visceral del capitalismo, tanto que ambos son antagonistas por naturaleza.
No hace falta ser un lince para entender que me estoy refiriendo a China.
En ella se practica el más feroz del capitalismo agresivo, al mismo tiempo que la mayor de las represiones que pueda imponer un régimen totalitario, al igual que como ocurre en Corea.
Los griegos, llaman a esto oximoron y los latinos contradicción en los términos, para que nos entendamos, un absurdo incoherente.
Eso lo han logrado los chinos con singular eficacia, han conseguido un comunismo capitalista.
Bien Julio, Pablo y todos los que habéis conseguido elaborar este engendro, decidnos qué régimen nos vais a imponer, si llegáis a gobernar para que nos vayamos preparando.
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