Entrevista a Rodrigo Plaza, autor de su primera novela “Batallitas” y director de cortos cinematográficos como “La duodécima hora” o “Territorio enemigo”.
Rodrigo Plaza nació en Madrid en 1982 y creció en el distrito de Villaverde. Estudió Comunicación Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos y Dirección de Cine en la ECAM.
Su cortometraje La duodécima hora contó con la leyenda del cine de terror español Paul Naschy y el cantautor Ismael Serrano. En 2022 fue editado en Blu-Ray dentro de una colección dedicada a Naschy.
Su segundo trabajo en 35mm, Territorio enemigo, se estrenó en la Semana Internacional de Cine de Valladolid (SEMINCI) y participó en más de 50 festivales internacionales, incluyendo el Festival du court métrage de Clermont-Ferrand (Francia) y el Festival Internacional de Cine de Viña del Mar (Chile). Fue seleccionado por Sundance Film Institute con un guión de largometraje para el NHK International Filmmakers Award.
Actualmente compagina su trabajo dentro del mundo de las finanzas y con la escritura.
P - ¿Qué te hizo elegir este tema para tu primera novela? R.P - “Llevaba un tiempo queriendo rescatar algunos recuerdos de infancia para escribir sobre lo que significaba ser niño a principios de los años 90. La historia tomó forma cuando empecé a combinar las aventuras escolares con el reencuentro de tres amigos, casi cuarentones, que tendrán que plantar cara a un oscuro acontecimiento del pasado que, de un modo u otro, ha marcado sus vidas”.
P -¿En quién pensaste a la hora de elegir el protagonista? R.P. - Tanto los personajes como la trama son ficticios. Sí es cierto que he tomado prestadas algunas vivencias propias, sobre todo a la hora de recrear el entorno en el que se desarrolla la novela: un barrio de clase media madrileño de hace treinta años, el colegio público como epicentro de la vida de estos chavales o la liga de fútbol sala.
Jugué y fui a clase con chicas y chicos muy parecidos a los protagonistas.
P - La novela está ambientada en la época de los 90. ¿Qué crees que es lo mejor y lo peor de aquella época? R.P. - Batallitas mira con cariño esa década, pero creo que hay poca nostalgia. No se idealiza el pasado. Se muestran algunos males que existían y siguen vigentes, como el bullying o la falta de comunicación, en ocasiones, entre adultos y niños o adolescentes.
Por otro lado, recuerdo aquellos años como un tiempo de posibilidades infinitas. Hay algo épico en la niñez, cuando una carrera en bicicleta se convertía en una gesta. He intentado captar esa sensación.
P- ¿Cuál es el personaje con el que más conectas y cuál con el que menos? R.P. - Todos los personajes tienen algo de mí, ninguno me es ajeno. Así funciona esto. Tengo debilidad por Pedro, el bruto de buen corazón. Es el compañero fiel de los otros dos protagonistas y, muchas veces, dice lo que los demás solo se atreven a pensar.
P- Al leer la novela observamos que va saltando del pasado al presente y viceversa. ¿Lo haces por alguna razón? R.P. - Se narra un curso escolar en la vida de los protagonistas como niños y se los retoma como adultos durante doce horas bastante intensas. La idea de alternar estas dos líneas temporales surgió de manera natural. La historia se podría haber contado en orden cronológico, pero habría perdido fuerza y misterio. Jugar con presente y pasado permite al lector anticipar algunas situaciones o elucubrar sobre otras.
P- Como director de cine, si tuvieras la oportunidad de llevarla a la gran pantalla a modo de corto o de largometraje ¿Lo harías? y de ser así ¿Harías algún cambio? R.P. - Quizás funcionaría como serie. Un capítulo podría centrarse en la fiesta de Navidad, otro en la guerra de globos de agua… los saltos temporales son muy habituales en series o películas así que podrían encajar bien.
P- A tu juicio, ¿qué idea quieres transmitir a los lectores contando esta historia? R.P. - Más que una idea, he intentado transmitir la atmósfera de un lugar y una época concretos, que coincidieron con el momento en que yo tenía diez u once años. Creo que Batallitas se pregunta si la amistad resiste el paso del tiempo y si realmente cambiamos al hacernos mayores.
P- ¿Crees que en función de la persona que lea tu novela, véase un adolescente actual o alguien de nuestra generación o la de nuestros padres, ésta se puede entender de diferentes maneras? R.P. - La novela está llena de referencias a la cultura popular de los años 80 y primeros 90. En ese sentido, hay ciertas claves generacionales.
Al mismo tiempo, todo lo que se cuenta es universal: enamorarse por primera vez, ser traicionado por un amigo, enfrentarse a aquello de lo que normalmente saldrías huyendo. Va a gustar a lectores de diferentes edades.
P- ¿Cuál será tu siguiente novela? ¿puedes hacernos un adelanto del tema que va a tratar? R.P. - (Entre risas) ¡Mi hijo me ha pedido que escriba una novela de terror! Soy obediente, así que estoy trabajando en la historia de una familia, en una aldea en el norte de España, que debe hacer frente a elementos sobrenaturales.
P- Comenzaste tu andadura en el audiovisual, como guionista y realizador. ¿Dónde podemos encontrar trabajos tuyos? R.P.- Uso https://escriberodrigoplaza.wordpress.com como portfolio. Ahí se pueden ver algunos cortometrajes, documentales o vídeos musicales que he hecho. También estoy en: Instagram: relatos_sin_frenos Facebook: Rodrigo Plaza Relatossinfrenos Youtube: www.youtube.com/@relatossinfrenos
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