El aumento de las temperaturas y las lluvias de estas últimas semanas son el caldo de cultivo perfecto para que se esté adelantando el enjambrazón de las termitas aladas. Las empresas especializadas en control de plagas, como Rentokil Initial, desempeñan un papel fundamental y necesario, ya que son capaces de acabar con las termitas de manera efectiva y poco invasiva
Las termitas aladas suelen aparecer a finales de abril, primeros de mayo, tras las lluvias primaverales de abril, pero, tras el mes de marzo de este año y sus lluvias, se han dado las condiciones climáticas ideales para el adelanto de los enjambrazones de termitas aladas.
Las termitas aladas necesitan de calor y humedad para procrear, es por esto por lo que esta primavera especialmente húmeda está adelantando su enjambrazón, y en consecuencia el proceso de apareamiento que es el origen de nuevas colonias de termitas.
Sin embargo, es importante destacar que las termitas aladas que solemos detectar cerca de las viviendas no son las responsables directas de los daños en la madera. Estas termitas tienen la función de reproducirse y establecer las colonias. Por otro lado, las verdaderas causantes del deterioro en la madera son las termitas obreras, que permanecen ocultas y trabajan dentro de la estructura. Por ello, eliminar únicamente las termitas aladas no solucionará el problema ni evitará los daños que esta especie puede causar.
No confundir las termitas aladas con hormigas aladas
Las termitas aladas a menudo se confunden con hormigas voladoras. Para evitar esta confusión es clave entender las diferencias anatómicas de estas dos especies. Por ello hay que fijarse en la forma del cuerpo, en las antenas y en las alas.
Las termitas tienen un cuerpo recto y uniforme, mientras que las hormigas presentan una cintura estrecha. Las termitas tienen antenas rectas y curvadas, las hormigas, sin embargo, las tienen anguladas. Finalmente, las alas de las termitas son todas del mismo tamaño, mientras que en las hormigas las alas delanteras son más grandes que las traseras
Señales de infestación en el hogar
Los signos que pueden detectar una infestación de termitas son: sonidos huecos en la madera, rodapiés que se rompen al barrer, ventanas o puertas que no cierran bien, alas desechadas en alféizares o suelos, túneles de barro o la presencia de un enjambrazón, es decir, la salida masiva de ejemplares de termitas aladas que se produce cuando estas buscan nuevos compañeros con los que poder aparearse y formar nuevos nidos.
El tratamiento más efectivo para su eliminación es un buen profesional del sector
Los tratamientos contra termitas subterráneas son complejos debido a que el termitero está en el subsuelo e incluso puede estar ubicado alejado del perímetro del edificio afectado. Por esto es necesario realizar una inspección minuciosa para detectar cuáles son los puntos de entrada de las termitas obreras a las estructuras de madera del edificio y una vez establecidos poder iniciar el tratamiento con suficientes garantías. Esta complejidad hace imprescindible la intervención de equipos profesionales especializados, capaces de proteger los hogares y erradicar las colonias con métodos efectivos, específicos y de bajo impacto ambiental. Por todo esto, es importante no recurrir a remedios caseros al descubrir la presencia de estos insectos, ya que lo más seguro es que resulten ineficaces o incluso agraven el problema.
Contar con un equipo experto en control de termitas como el de Rentokil Initial permite un diagnóstico preciso del problema. Los tratamientos consisten en la instalación de un sistema de cebos con un producto específico para termitas, y que las obreras se encargarán de llevar al interior del termitero, de forma que se acaba progresivamente con la población del mismo. Este tratamiento se tiene que prolongar en el tiempo hasta que desaparezca toda actividad de termitas. Normalmente en el primer año se acaba con el 99% del termitero y después es necesario seguir con inspecciones y monitorizaciones para garantizar que no se produzca una reinfestación.
|