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Quiebra | |||
Mientras en España se propagan gratuitos eslóganes optimistas, en los foros internacionales se da casi por segura la quiebra española | |||
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No es sólo España –está en el saco todo el sistema, y, con él, las mayores potencias económicas-, pero choca la disparidad de noticias sobre el mismo asunto de una potencial quiebra española, ya que si nos atenemos a lo que nuestros políticos dicen, la cosa está encarrilada y se puede salir; pero si uno pone la antena a lo que se asegura en los foros financieros internacionales, pues la cosa está mucho más que negra, tal y como Goerge Soros ha asegurado recientemente por esos mundos de Dios, y no es el único. Aunque el PP llegó al poder con la promesa de ser franco (va sin segundas) y veraz, pues me temo que de eso nanay, porque debe haber demasiados cadáveres en el armario de las finanzas españolas como para sacarlos todos a la vez. Por esto se ha decidido en no alarmar a los tiburones internacionales a los que les debemos ya el futuro, y se ha dedicado en cuerpo y alma a ordeñar al ciudadano, cosa que por de más será inútil, porque el efecto previsible es que se va a multiplicar la economía sumergida, al tiempo que las quiebras de sociedades y empresas va a elevarse a la enésima potencia, dejando en el arroyo a unos cuantos millones más de desempleados que, lejos de cotizar, cobrarán de las ya exigüísimas arcas del Estado. Mal futuro nos espera. Rescatar a los bancos, algunos de ellos ya en la UCI y con un demonio al lado esperando para recoger su alma, se presenta como algo tan absurdo como inútil, no sólo por la colosal cuantía que eso supondría, sino porque enseguida esos pillos se repartirían dividendos, que es para lo que suelen usar los dineros de las ayudas en vez de usarlos para que el crédito fluya. Y fluye, claro que fluye, pero a los bolsillos de los tramposos, y quien dice bolsillos, dice fundaciones, paraísos fiscales y lo que se tercie, si es que no a jubilaciones de ésas de cientos de miles de euros mensuales por haber quebrado un banco o una caja, y ¡olé morena! Se podría exigir –se debería- que todas esas viviendas que tienen en stock los bancos sólo para especular, dando la equívoca impresión de que tienen una solvencia que en la actual tesitura todo está en un inmovilizado evidente; pero no lo harán, porque si las sacaran a la venta o al alquiler para rentabilizar ese capitalazo que está devaluándose solo, si es que no deteriorándose –las casas vacías se deterioran a un ritmo vertiginoso-, entonces no tendrían posibilidad de que se les socorriera, que es su negocio más brillante y por el que están tensando la cuerda de la necesidad y el bloqueo del crédito. De modo que aunque España quiebre, a ellos tanto les da, que el dinero no tiene patria, lo que significa, dicho en román paladino, que de la quiebra no nos salva ni el Santísimo, y ello si es que no terminamos con un corralito, cada día que pasa mucho más que posible. Coge el dinero y corre, que diría Woody Allen. O eso o la guerra, que es la salida de la puerta de atrás, por la que parece que se han inclinado israelíes, EEUU y Europa, aunque es posible que este órdago se vuelva contra el sistema. De perdidos al río, parece que han dicho los políticos, y desde luego con el desempleo se va a terminar por la vía rápida, y con el empleo también, porque lo que único que van a quedar son las montañas ésas de ruinas que serían el escenario para que se cumpliera la profecía de Albert Einstein sobre que la guerra que seguiría a la que se nos viene encima usarían los combatientes palos y piedras. Por lo pronto, aunque se diga poco de todo ello, chinos y rusos no sólo se están preparando para ello militarmente, sino que ya han comenzado despliegues de armas estratégicas que nos están tomando por blanco. Que no se puede sostener una sociedad basada en un sistema que no funciona es algo que está al alcance de que lo entiendan…, qué sé yo, hasta los políticos; pero por lo que se ve, éstos sólo se esfuerzan en volver a lo de antes porque no tienen otro sistema de repuesto, y en cualquiera otro que pudiera aparecer por ahí, pues ellos, como es natural, no tendrían cabida. De modo que verdes las pintan, porque, como en el tango, o de ellos o de nadie. Y esto, precisamente, es lo que da más miedo, porque no piensan así sólo los políticos –si es que piensan-, sino que también lo hacen los financieros, los de El Club (léase “Sangre Azul, El Club” -ES GRATIS-, o entreténgase viendo este video http://youtu.be/l2YXf9EeBBY), siendo que estos últimos tal vez desean esa quiebra, por extraño que pueda parecer, quién sabe si porque están sacrificando un alfil para darle jaque-mate al rey, nuestro sistema, y no ganarse algo, sino el reino entero. Puedes conocer toda la obra de Ángel Ruiz Cediel: Un autor que no escribe para todos (Sólo para los muy entendidos) |
La subida de los precios de la vivienda sigue disparada. Un estudio de la Unión Europea (UE) ha calculado que se necesitarían -dedicando el 40% de los ingresos- de 25 a 35 años para adquirir una vivienda mediana. Respecto al alquiler, el mismo estudio calcula que, dedicando un 40% de los ingresos solo sería posible alquilar un inmueble de entre 30 y 50 metros cuadrados.
Permítanme, apreciados lectores, hacer un repaso de Europa desde los inicios del pasado siglo XX después de observar en lo que se ha convertido esta maligna Unión Europea que nos gobierna a todos. A principios del siglo XX los mapas de Europa no se parecían a los de hoy, ya que destacaban cuatro imperios: el alemán, el austro-húngaro, el ruso y el otomano.
Como historiador, mucho me alienta hacerlo con alta responsabilidad; no solo indicando el dato, sino por contribuir a elevar el nivel de conciencia histórica en búsqueda de crear ciudadanía, y así lograr cambios y mejores valores acordes a los legados valiosos de las actividades y actitudes por los personajes que con sus glorias han hecho historia.
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