| Ficha técnica | 92- FIATC Mutua Joventut: Jeter, Van Lacke, Jelínek, Llovet, Williams -cinco inicial--; Oliver, Báez, Obasohan, Tomás, Norel, Trias y Barrera.
79- Assignia Manresa: Rodríguez, Gladyr, Downs, Doellman, Asselin --cinco inicial--; Palsson, Hernández, Cerqueira, Hanga, Achara, Oriola y Ibaka.
Parciales: 22-22, 21-25, 28-25 y 21-17
Árbitro: Perea, Cortés y Castillo.
Incidencias: 4.840 espectadores en el Olímpic de Badalona. |
Datos destacables | Lo mejor: La vuelta de Pere tomás El FIATC Mutua Joventut necesita de su capitán para enderezar el rumbo en la segunda vuelta y el mallorquín lo sabe. Su estreno en esta liga deja blanco y en botella que el mallorquín está de vuelta. Lo peor: En 22 minutos de juego Sergiy Gladyr fue incapaz de anotar una sola canasta
El dato: El Assignia Manresa lanzó un total de 26 tiros libres en la primera parte |
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Con la mejor anotación de la temporada y el retorno de Pere Tomás, el FIATC Mutua Joventut se deshizo del vecino manresano en un partido marcado por la buena hazaña de los americanos Pooh Jeter (15 pts; 6 asistencias) y Latavious Williams (18 pts; 7 rebotes). Los del Bages tuvieron en Justin Doellman la referencia del equipo, pero la merma sufrida en la segunda mitad condenó a los de Ponsarnau que suman su décima derrota del campeonato. El primer cuarto tuvo todos los ingredientes que se esperan de un derbi de alto voltaje: emoción, ritmo y mucha brega. Pero el buen espectáculo en el parquet fue mancillado por un rosario de malas decisiones del trio arbitral. Las 13 faltas pitadas en los 15 primeros minutos sobre los verdinegros, colmaron la paciencia del míster Salva Maldonado, que fue expulsado del encuentro por dos técnicas consecutivas, a raíz de un reproche demasiado airado. Los cuatro tiros libres y la posterior posesión permitieron a Justin Doellman y Achara poner a los suyos en franquicia: 28-31.
La coyuntura prendió fuego a un Olímpic que veía cómo su equipo era sancionado una y otra vez por los trencillas. Pero la presión de las gradas no erizó a los jueces, y entre pitos e injurias volvieron a sancionar con una técnica a un jugador local, Fede Van Lacke.
Entre la vorágine vivida entre la afición, estaba el Manresa, silencioso y desmarcándose de cualquier polémica. Los pupilos de Ponsarnau, sin hacer mucho ruido, aprovecharon la tesitura belicosa para cerrar la primera parte 43-47.
Entonces, viendo que su presencia bastaba con ser testimonial, los árbitros dieron un paso atrás y dejaron los focos a los jugadores. Fue cuando la Penya desplegó, con serenidad y firmeza, su mejor basket de la tarde. Volvió Williams sobre los interiores manresanos y el conjunto de Ponsarnau cedió el tercer cuarto por 71-62.
Pero con un triple del incesante Micah Downs y la continuidad de Asselin, el Assignia se enganchó a cinco puntos de la Penya (79-74). En vez de arredrarse, Jelínek solventó cuatro tiros libres para dejar el triunfo en tierras badalonesas.
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