Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Productividad
Etiquetas | Viajando por las emociones | Coaching

Crecimiento Post-traumático

Generar un nuevo enfoque vital tras el crecimiento post-traumáticos nos dirige a centrarnos en las nuevas oportunidades que aparecen en la vidas tras el evento traumático
José J. Rivero
sábado, 7 de octubre de 2017, 12:28 h (CET)
Normalmente cuando hablamos de dolor y de sufrimiento lo vinculamos con elementos de desajustes personales, de rupturas con tu propia vida e incluso de elementos que atentan contra ti mismo provocando cambios en negativo, difíciles y en ocasiones imposibles de abordar. Lo que normalmente nos va cargando de miedos y situaciones que nos cuestan afrontar por esas vivencias tan complejas que no hemos incorporado a nuestra vida en crecimiento.

Por ello creo es importante saber que la opción existe y se denomina crecimiento post-traumático, es decir ese concepto que hace referencia al cambio psicológico en positivo que experimenta la persona atraviesa, afronta y supera una situación de vida compleja.

Cuando hablamos de crecimiento postraumático entendemos que existe un cambio en tu vida, que normalmente viene marcado por un proceso de perdida, de separación y ruptura con lo anterior, que nos plantea experimentar el duelo necesario. Además entendemos que ese proceso de cambio no nos lleva al momento anterior a la vivencia traumática sino que se experimenta una transformación general, produciendo en nosotros una mejora personal, que en algunos casos es inmensamente significativa por los elementos que reuvicamos en nuestra vida y todos aquellos que sumamos en diferentes momentos.

Por esa razón entendemos que ese cambio en las personas debe de ir más allá de nuestra propia capacidad de resistir e intentar no ser dañados por las situaciones vitales que atravesamos. Sino que es necesario experimentar una mejoría a nivel de pre-trauma de nuestra adaptación.

Estarás de acuerdo conmigo que es evidente aprender a gestionar las situaciones complejas de esta forma tan transformadora, pero claro, la pregunta a contestar es quizás:

¿Qué pongo en mi vida para potenciarlo?

Dicen los estudios que en primer lugar debemos de cambiar la visión con la que observamos lo que nos sucede en la vida, debemos por lo tanto aprender a interpretar los sucesos traumáticos como retos a superar, asumiendo una visión adaptativa que plantee importantes desafios en nuestro crecimiento personal.

Otro de los elementos fundamentales que nos aporta crecimiento personal es sin duda la capacidad de trascendencia, entendiendo esa capacidad de las personas de crecer, de ir más allá, alguna personas enfocan esta trascendencia hacia la espiritualidad, hay que decir que la personas que experimentan un crecimiento post-traumático. Es importante destacar que muchas personas tras la vivencia de un evento traumático suelen consolidar creencias como resultado de la vivencia del trauma.

Parece jugar un papel importante lo que denominamos inteligencia social, marcada por esa tendencia de las personas a potenciar las relaciones personales como elementos fundamental en el crecimiento post-traumático. Las personas extravertidas y abiertas a nuevas experiencias que cuentan con apoyo social previo a la vivencia traumática está asociada con un mayor crecimiento.

La personas optimistas también generan un alto potencial en emprender procesos y vivencias de crecimiento post-traumático. Coincidirás conmigo que son capaces de centrar la atención y todas sus herramientas y recursos en el momento actual dejando a un lado aquellos problemas que no afectan a la situación actual. Creen en sus posibilidades y así lo manifiestan.

Sin duda generar un nuevo enfoque vital tras el crecimiento post-traumáticos nos dirige a centrarnos en las nuevas oportunidades que aparecen en la vidas tras el evento traumático.

Noticias relacionadas

En el entorno empresarial, la dinámica de grupo es crucial para alcanzar los objetivos organizacionales. Sin embargo, es común que surjan conductas difíciles de manejar dentro de los equipos, lo que puede afectar la productividad y el ambiente de trabajo. Vamos a explorar algunas de las conductas más comunes que los miembros problemáticos pueden mostrar, así como estrategias prácticas para abordarlas y mejorar la dinámica grupal.

El ruido es uno de los problemas más comunes en los hogares modernos, especialmente en zonas urbanas donde el tráfico, las obras y las actividades vecinales pueden perturbar la tranquilidad. Según datos de la OMS, el ruido excesivo afecta la calidad del sueño, aumenta el estrés y puede tener consecuencias negativas para la salud mental. Afortunadamente, existen estrategias prácticas y accesibles que pueden ayudar a reducirlo de manera efectiva.

Ana regenta una pequeña tienda familiar que heredó de sus padres. Durante años, el negocio marchó bien, pero los cambios en las preferencias de los clientes y la creciente competencia online comenzaron a afectar las ventas. En lugar de rendirse, Ana decidió invertir en la formación de su equipo.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto