El Gobierno justifica la expulsión de diplomáticos rusos y dice que se violó su soberanía
El nuevo ministro de Exteriores de República Checa, Jakub Kulhanek, ha jurado este miércoles el cargo ante el presidente, Milos Zeman, en el marco de un aumento de la tensión con Rusia a raíz de la reciente expulsión de diplomáticos de ambos países. El presidente, durante un discurso en el que ha pedido no entrar en una disputa diplomática con Moscú, ha pedido al nuevo ministro "defender los intereses nacionales" sin incurrir en un "excesivo nacionalismo". Uno de los primeros actos oficiales de Kulhanek en el cargo será presentar una nota de protesta ante el embajador ruso, Alexander Smejewski. Hasta hace dos semanas y media, Tomas Petricek se encontraba al frente del Ministerio. Sin embargo, presentó su dimisión tras perder una disputa por el liderazgo de su partido. Desde entonces, el ministro del Interior, Jan Hamacek, llevaba la cartera ministerial de forma interina. El país celebrará elecciones parlamentarias en menos de seis meses y las encuestas sobre intención de votos apuntan a una posible derrota de la coalición de Gobierno, formada por los socialdemócratas y la populista Alianza de Ciudadanos Descontentos (ANO, por sus siglas en checo) del primer ministro Andrej Babis.
DEFENSA DE LA EXPULSIÓN DE DIPLOMÁTICOS
Este mismo miércoles, el Ministerio de Exteriores ha defendido la expulsión de los 18 trabajadores de la Embajada de Rusia en el país y ha matizado que la supuesta participación de agentes de la Inteligencia rusa en una explosión registrada en un arsenal en 2014 es una "violación de la soberanía" del país. Así, en una serie de declaraciones ante los miembros de la OTAN, las autoridades checas han justificado las últimas tensiones con Moscú, que también ha expulsado a una veintena de diplomáticos checos por considerar "hostiles" los movimientos de Praga. Para el Gobierno checo, lo sucedido en Vrbetice es "inaceptable" y puso en peligro la seguridad nacional de República Checa, por lo que ha llamado a "responder de manera apropiada", tal y como recoge un comunicado. Así, ha pedido a la OTAN que emita un texto conjunto sobre lo sucedido, si bien ha dado las gracias a los aliados por su "manifestación de solidaridad" hasta el momento. En este sentido, ha solicitado además que se convoque una reunión a finales de esta semana para abordar la posibilidad de poner en marcha acciones coordinadas. La Policía de República Checa divulgó el sábado las imágenes de dos hombres sospechosos del incidente, que costó la vida a dos personas, y han señalado que se barajan varias identidades, entre ellas las de dos individuos a quienes la Policía británica considera como posibles autores del envenenamiento en Reino Unido del exespía ruso Sergei Skripal. Esas mismas imágenes aparecieron por vez primera en un comunicado de la Policía Metropolitana de Londres en 2018, cuando los agentes identificaron a 'Petrov' y a 'Boshirov' como los principales sospechosos del envenenamiento en Salisbury del exespía ruso con un agente nervioso, y a quienes los fiscales acusan también de intentar asesinar a un oficial de Policía que resultó afectado por la misma sustancia. Ahora, República Checa relaciona a ambos con la detonación en Vrbetice. Precisamente, durante la jornada del lunes, el fiscal general de República Checa, Pavel Zeman, reiteró que los sospechosos de estar involucrados en el caso Skripal están relacionados con las explosiones en Vrbetice en 2014. En este contexto, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha señalado este martes que Rusia considera "infundadas y gratuitas" las acusaciones checas. "Estas acusaciones gratuitas e infundadas de la contraparte checa son, por supuesto, indignantes", ha dicho.
|