Las autoridades de Irak han condenado este miércoles el ataque perpetrado por las fuerzas israelíes contra un edificio del sur de Beirut, la capital libanesa, donde han muerto cuatro personas, y ha acusado al país de violar el Derecho Internacional.

El Ministerio de Exteriores del país ha indicado que "se trata de una agresión dirigida contra civiles y edificios residenciales", lo cual ha tildado de "acto hostil y una clara violación de los tratados internacionales", según recoge un comunicado.

Bagdad ha expresado que considera que este ataque es una "grave amenaza" para la estabilidad regional y ha advertido de sus posibles consecuencias negativas para la paz en la región.

Además, ha indicado que es necesario que la comunidad internacional "intervenga inmediatamente para poner fin a las repetidas violaciones" por parte de Israel y garantizar la seguridad de los civiles en Líbano.

Además, Irak considera necesario que la comunidad internacional "intervenga inmediatamente" para poner fin a las "repetidas violaciones y actos hostiles" por parte de Israel y garantizar la seguridad de los civiles en el Líbano.

El propio jefe del Ejército israelí, Daniel Hagari, aseguró el martes haber matado al jefe militar del partido-milicia libanés Hezbolá, Fuad Shukr, en el ataque perpetrado en el sur de la capital. Junto a él habría muerto, además, un asesor de Hezbolá, según fuentes israelíes.

Sin embargo, no ha sido hasta este miércoles que Hezbolá ha señalado que Shukr se encontraba en el edificio atacado por Israel, aunque no ha confirmado su fallecimiento. Por contra, ha indicado que cuatro civiles han muerto, entre ellos una niña de seis años y un niño de diez.