El ministro de Exteriores británico aboga por reforzar la diplomacia con China en su primera visita

David Lammy promete resolver la falta de diálogo bilateral achacada a sus predecesores

El ministro de Exteriores de Reino Unido, David Lammy, ha abogado por profundizar en la vía diplomática con China y ha ofrecido una postura de "coherencia" británica tras lamentar el "suficiente contacto" entre Londres y Pekín bajo sus predecesores, en particular en cuestiones de Derechos Humanos.

Durante su primera visita oficial al gigante asiático, Lammy se ha reunido con el viceprimer ministro chino Ding Xuexiang y el ministro de Asuntos Exteriores, Wang Yi, para tratar espacios de cooperación, las preocupaciones de Reino Unido sobre el tratamiento de los uigures en Xinjiang, la detención del ciudadano británico Jimmy Lai en Hong Kong y los ejercicios militares chinos cerca de Taiwán.

En declaraciones a los periodistas en Shanghái este sábado, Lammy ha explicado que las reuniones eran "el comienzo de un proceso", añadiendo que había sido importante "reiniciar el diálogo". "Sólo en el diálogo podemos lograr un mejor entendimiento y cambio, y creo que lo que hace falta es más diplomacia, no menos", ha aseverado.

Lammy es el segundo ministro de Asuntos Exteriores británico que visita China en los últimos dos años.

El conservador James Cleverly hizo el viaje en 2023, pero antes de eso, las relaciones entre los dos países se habían tensado, y ningún ministro de Asuntos Exteriores había viajado a Pekín desde Jeremy Hunt en 2018.

Lammy criticó el enfoque del gobierno anterior hacia China como "inconsistente". "Lo que la gente también quiere es coherencia. Lo que quieren las empresas es estabilidad y claridad, y eso es lo que el gobierno del Reino Unido, dirigido por Keir Starmer, promete para este próximo período", ha indicado.