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Algunos documentos dicen que Santiago, "pasando por Asturias, llegó con sus nuevos discípulos a través de Galicia y de Castilla, hasta Aragón, Celtiberia, la Cesaraugusta romana, hoy Zaragoza, en la ribera del Ebro. Allí predicó Santiago y, entre los muchos convertidos eligió a ocho hombres".
No hay que ser un Metternich para concluir en la inconveniencia de las discusiones históricas en política exterior. Y ello es tan evidente que podría constituir una ley si no matemática, desde luego que sí diplomática. La carta del todavía presidente del añorado México, que cesará en octubre, reclamando hace un lustro que el rey de España (y el Papa) reconozca y pida perdón por los abusos cometidos durante la conquista, forma parte consustancial del ser imperial de España.
Si bien las recetas de Marcelo Gullo no son asumibles por todos (un catolicismo que definiríamos como conservador si estuviéramos seguros de ello), su diagnóstico sobre lo ocurrido en Iberoamérica resulta, como mínimo, interesante, y es una luz que incita a desconfiar en la actualidad de esa cultura mundial que interesadamente quiere uniformarnos.
Hispanidad es el conjunto y comunidad de los pueblos hispánicos. El nombre Hispanidad se debe al obispo de Ereso, el vasco Zacarías de Vizcarra, que acuñó el término en 1926, en su artículo ‘La Hispanidad y su verbo’, publicado en Buenos Aires. Quería cambiar el nombre ‘día de la raza’, con el que se conmemoraba la llegada de Colón a América el día 12 de octubre, “Y no halle otro mejor que Hispanidad”, escribía el mitrado.
Hace unos días, Enric Juliana -con su habitual sabiduría- plateaba que “en el actual cuadro internacional, la Iberosfera cobra sentido, pero un sentido distinto al imaginado por la extrema derecha española” porque “la extensa Iberoamérica multiplica su valor como proveedora de alimentos y materias primas, como potencial destino de inversiones, como retaguardia de las graves tensiones que tienen lugar en la gran plataforma continental euroasiática..."
El 12 de octubre de 1492 es una de las fechas más importantes y controvertidas de la historia. Mientras en España se le considera el día de la hispanidad (pues, a partir de entonces, el español se internacionalizó hasta convertirse en la mayor lengua materna del mundo fuera del chino) diversos gobiernos o movimientos izquierdistas sur y centro americanos lo conmemoran como el día de la resistencia indígena.
La extrema derecha ha creado el Foro de Madrid para organizar a las fuerzas que quieren derrocar a todos los gobiernos "progresistas" de lo que VOX llama "la iberosfera" (la esfera de influencias de la Iberia castellana), la misma que quiere expandirse a todos los países hispano-hablantes, a Brasil y Portugal. Su primer objetivo: unir a los golpistas que quieren deponer al último gobierno electo de la izquierda iberoamericana.
Tanto el término “indio” como el de “caníbal” son fruto de errores. A los habitantes nativos del nuevo mundo se les empezó a denominar “indios” porque Colón pensó que había llegado a las Indias. El equiparar a los nativos caribeños con el canibalismo fue una manera de justificar la matanza de una raza tan supuestamente perversa.
Pero en lugar de examinar la actuación española en aquel continente, somos tan obtusos que ensalzamos al fraile Bartolomé de la Casas que no quería que los indios trabajaran sino que se trajeran negros de África, pues pronto empezó la trata de personas, reyezuelos que cazaban a otros negros para venderlos a europeos de varias nacionalidades que entraron a saco donde pudieron.
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