Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Baloncesto
Etiquetas | LIGA ENDESA | Real Madrid | Barcelona

La victoria de la fe para el Real Madrid (76-72)

La magia de Sergio Rodríguez (21 puntos) y el pundonor de Felipe Reyes fueron determinantes en el triunfo del Real Madrid
Rafael Merino
domingo, 9 de junio de 2013, 12:41 h (CET)
Ficha técnica
76 - Real Madrid: Llull (19), Rudy Fernández (14), Suárez (0), Mirotic (5) y Begic (6) -quinteto titular- Sergio Rodríguez (21), Carroll (5), Slaughter (2), Hettsheimeir (-), Draper (0), Darden (0) y Reyes (4).
72 - Barcelona: Huertas (10), Navarro (15), Rabaseda (0), Wallace (0) y Tomic (6)-quinteto inicial- Sada (17), Jasikevicius (-), Todorovic (-), Ingles (3), Mavrokefalidis (4), Oleson (9) y Lorbek (8).
Parciales: 21-14, 14-31, 15-13, 26-14. Árbitros: Pizarro, Conde y Peruga.
Incidencias:Primera jornada correspondiente a las final de los ‘Play-Off’ de Liga Endesa, disputado en el Palacio de los Deportes (Madrid) ante 10.859 espectadores.
El baloncesto siempre ofrece encuentros apasionantes cuando aparecen en escena Real Madrid y Barcelona. La calidad de sus jugadores, sorpresas tácticas, arbitrajes polémicos… siempre acuden puntuales a su cita, máxime cuando se trata de una final de Liga Endesa. Fue con mayúsculas un partido de fabricar aficionados. No sólo conllevó el triunfo del Real Madrid y su defensa del factor cancha, sino una remontada increíble e impensable ante un notable Barcelona. Fue una victoria de fe para el Real Madrid, representada como siempre en Felipe Reyes y en un mágico Sergio Rodríguez (12 puntos en el último cuarto).

El panorama del Real Madrid era bastante oscuro. No únicamente porque se marchó al descanso con diez puntos de desventaja (35-45), sino porque estaba completamente desdibujado. No era el Real Madrid de las grandes ocasiones, no era ese Real Madrid que ataca en oleadas certeras, ni siquiera ese Real Madrid que defiende con el cuchillo entre los dientes. Era un equipo endeble, con bastantes costuras sólo al descanso. Todas las heridas se concentraron en un hombre: Víctor Sada (17 puntos). El base tomó el mando del encuentro y demostró su mano caliente en el triple (4 de 4). El Barcelona estaba noqueando al Real Madrid. Y era sólo el segundo cuarto. Nada se recordaba de esas tímidas ventajas blancas en el comienzo (11-5 o 21-14), cuando parecía que el Real Madrid estaba más enchufado en el clásico.

Fue aparecer Sada en escena y derrumbarse todo el Real Madrid. El parcial fue escandaloso: 2-16 nada más encenderse el tiempo del segundo acto. El Barcelona era un ciclón en ataque, con transiciones rápidas y tiros certeros; defensivamente, incluso, todo era mejor, porque ni el Real Madrid anotaba ni daba velocidad a su juego. El Barcelona tenía, por consiguiente, el partido en su bolsillo. Quedaba eso sí todo el segundo tiempo.

Felipe Reyes, rebote clave
Éste comenzó con Navarro anotando desde el exterior (37-50), y dando muestras de que todo empezaba a decantarse a favor del Barcelona (tuvo una renta de hasta 12 puntos a favor). Nadie hubiera apostado por el Real Madrid. Porque debía producirse una metamorfosis de considerables proporciones. Pero sucedió. El Real Madrid se quedó a sólo 8 puntos en el arranque del último cuarto (50-58). Fue entonces cuando, esa fe que tiene el Real Madrid en sus opciones apareció en la cancha del Palacio de los Deportes. Fue cuando apareció Sergio Llull para ir sumando puntos desde los tiros libres, cuando Slaughter apareció en el vértice de una defensa aguerrida (la misma que hundió al CSKA de Messina en Euroliga), cuando Sergio Rodríguez se hizo dueño y señor del balón, anotando y mandando, y cuando Felipe Reyes capturó dos rebotes ofensivos, especialmente el segundo (73-72), certificando la remontada del Real Madrid. Y en escasos segundos, los árbitros (muy desacertados hasta entonces) desataron la polémica, la verdadera polémica cuando no vieron una mano sospechosa de Sergio Llull en una entrada a canasta sobre Sada. Ni falta ni balón al Barcelona. El Real Madrid cerró así su primer triunfo en esta final. Será recordado como el triunfo de la fe.

Noticias relacionadas

San Pablo sigue siendo inexpugnable para sus rivales, y eso lo ha comprobado esta mañana un Inveready Gipuzkoa que ha hecho un partido más que digno pero que ha terminado por sucumbir ante el mayor potencial ofensivo de un Betis Baloncesto que, al final, hizo disfrutar al homenajeado del día, uno de los máximos exponentes del club durante la época como CB Sevilla/Caja San Fernando como Benito Doblado, que ya puede ver colgada su camiseta número 12 en el techo del pabellón San Pablo junto al dorsal 9 de su compañero de generación Raúl Pérez. El equipo verdiblanco mantiene la cuarta plaza de Primera FEB.

El Betis Basket sigue sin conocer la derrota como local, siendo esto lo único positivo que se puede extraer del partido de esta noche. Los verdiblancos, tocados profundamente tras las últimas palizas en Fuenlabrada y en la Copa España, han ganado esta noche al penúltimo clasificado de Primera FEB, el HLA Alicante, en un partido que no pasará precisamente a la historia.

San Pablo vivió el segundo derbi sevillano de la historia y de la temporada, después del celebrado a principios de temporada en la Copa España. Y, como aquel, el Betis volvió a salir victorioso frante al Naturavia Morón, pero con un desarrollo bien distinto al de aquel. Los béticos terminan 2024 invictos como local pero con muy necesarias mejores; mientras que el Morón, pese a continuar con cero triunfos, está bien vivo, al menos de cara al semana a semana.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto