Las ofertas de empleo de las empresas con exigencia de titulación en Formación Profesional van a alcanzar el 50% del total en un plazo de apenas cuatro años, mientras que las titulaciones universitarias se van a mantener en los actuales niveles o incluso se van a reducir por la evolución del mercado académico y profesional.
Así lo pone de manifiesto un análisis elaborado por un grupo de expertos convocados por el Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada, en el que se destaca que la Formación Profesional está experimentado tasas de crecimiento en los últimos años en torno al 6% anual y en los próximos años todo indica que se va a producir un incremento de este ritmo de crecimiento.
De ese modo, podrá alcanzar en un plazo estimado de cuatro años esa cota del 50% de exigencia de titulación en la oferta laborar que las empresas colocan en el mercado. Uno de los elementos esenciales para justificar este ritmo de crecimiento está en el alto grado de empleabilidad que está consiguiendo la Formación Profesional, con una media por encima de 70% y con algunas titulaciones y niveles de formación que se aproximan al 90% de empleabilidad.
Los expertos del análisis realizado por el Instituto Coordenadas argumentan que la Formación Profesional, al contrario de lo que está sucediendo con la universitaria, muestra unos niveles de flexibilidad y de proximidad a la realidad laboral en el mundo empresarial que “le está permitiendo diseñar un catálogo de especialidades pegadas al terreno del empleo, de las necesidades reales de las empresas y del desarrollo profesional de sus estudiantes”.
Uno de los motivos es que el cambio tecnológico avanza a velocidad de vértigo y al mismo ritmo cambian las habilidades y competencias de los profesionales en las empresas. Por eso, la Formación Profesional “está liderando la aproximación a las necesidades reales de competencias y habilidades que tienen el mercado de trabajo”.
“Es una realidad que en un buen número de empresas hay una escasez crónica de profesionales en determinadas especialidades, sobre todo las ligadas al sector mecánico, que habían quedado relegadas ante el impulso de otras especialidades más tecnológicas”, aducen.
Sin embargo, los analistas del Instituto señalan que esta escasez en esas áreas concretas “está creando un nuevo modelo de especialista, los expertos en mecatrónica, con una nueva configuración de competencias y habilidades que atrae a un número cada vez mayor de estudiantes que tienen todas las características para convertirse en un élite dentro del mundo de la formación profesional. Son profesionales polivalentes que satisfacen una demanda laboral cada vez más amplia y exigente y en multitud de campos de actividad”.
El empuje de la Formación Profesional ha llevado al Gobierno a acelerar la tramitación de la nueva Ley Orgánica de Ordenación e Integración de la Formación Profesional que, en opinión de los analistas del Instituto Coordenadas, puede convertirse “en la herramienta clave para que, de una vez por todas, se impulse este modelo educativo”.
Para el vicepresidente ejecutivo del Instituto Coordenadas, Jesús Sánchez Lambás, “la Formación Profesional está en fase de dignificación social y crecimiento imparable; ha sabido adaptarse a la realidad del mercado laboral a la velocidad que exigía el mundo de la empresa, lo ha hecho con enorme precisión y va a ser elemento clave para el crecimiento económico de este país”. Por ello, declaró en un comunicado que son “muy importantes los parámetros de calidad de graduados y de empleabilidad de los centros privados destacados en el ranking de Strategik, que apuntan a una oferta formativa muy cualificada y orientada a la demanda real del mercado laboral actual”.
|