Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Libros
Etiquetas | Entrevista | Sergio Sánchez–Quiu | Escritor | Novela

«Escribir bien es una cosa y armar una trama y narrar con interés es otra muy distinta»

Entrevista a Sergio Sánchez–Quiu, escritor de novela histórica y contemporánea
Eva Fraile Rodríguez
martes, 4 de octubre de 2022, 09:24 h (CET)

Sergio Sánchez–Quiu es un escritor de novela histórica y contemporánea que ha publicado, hasta la fecha, tres novelas: El futuro en sus ojosCuadernos del pasado y El presente de todo. Aunque confiesa haber escrito su primera obra por instinto, el trabajo de fondo que hay en esta trilogía es inmenso. Encontramos distintas líneas temporales, narradores cuasi–omniscientes, figuras literarias y otros recursos narrativos que hablan de un extraordinario talento a la hora de juntar letras. Ya ha vendido más de 600 ejemplares con sus novelas.


Sergio, vamos a conocer un poco más de ti de la mejor forma posible: conociendo tus novelas. Así que, cuéntame, ¿por qué has elegido moverte en el género histórico/contemporáneo?

La época de mi vida en la que más he leído ha sido la adolescencia. Las siempre criticadas lecturas obligatorias de secundaria fueron cruciales en mi vida. Leer con 16 años Crimen y castigo o La dama de las camelias es como recibir un electroshock si ya eres una persona imaginativa. Además, si te gusta la historia y quién te la explica tiene cierta gracia, pues ya tenemos mucho ganado. Así que, si con 17 años cae en tus manos El Ocho, la maestría de Neville para crear la duda entre realidad o ficción y su habilidad para manejarse entre dos épocas intercalando episodios y conseguir mantener la tensión narrativa, hizo el resto. De hecho, recuerdo perfectamente estar leyéndolo y prometerme que, si escribía alguna vez una novela, tendría la misma estructura. Y así fue.


¿Cómo de fácil o difícil es encajar a personajes reales y ficticios en una obra?

Si te has documentado bien o no te da pereza documentarte a medida que avanzas, considero que es relativamente sencillo encajar personales reales y ficticios. De los personajes históricos conocemos momentos concretos que traspasan la historia por su importancia, pero hemos de pensar que estos personajes también habitaban su cotidianidad. Creo que el truco es situar a nuestro personaje ficticio junto al real en cierto momento histórico, es decir, que sea posible que también pudiese estar ahí nuestro personaje; así asentamos la base de la verosimilitud para, después, poder mover a nuestro personaje junto al histórico en momentos, digamos, más cotidianos, que son los que acaban de crear la magia de la duda. De todas formas, hay que ser muy cuidadoso para no incurrir en falsedades manifiestas que pudiesen restar credibilidad a nuestra trama y deshacer el embrujo.


FSO 3D mejorada


El futuro en sus ojos es tu primera novela publicada, ¿verdad? Y, sin embargo, te atreves no solo con un argumento histórico familiar, sino también con dos líneas temporales, lo cual podría dar mucho vértigo a un escritor novel. ¿Qué técnicas narrativas te ayudaron a desplegar esta historia?

Considero que el vértigo no existe cuando te lanzas sin planificar nada y, todavía, ni siquiera te consideras escritor. Nos pasa a muchos que, como siempre nos han dicho que redactamos bien, creemos que somos escritores, cuando escribir bien es una cosa y armar una trama y narrar con interés es otra muy distinta. No me arrepiento de haber escrito por instinto, pero me hubiese gustado que alguien me hubiese avisado del tiempo que me ahorraría si tenía en cuenta ciertas herramientas literarias. Ahí es cuando aparece el vértigo. Si así hubiese sido, quizás no tendría que haber reescrito parte de la historia.


Por ejemplo, tras una revisión a fondo, decidí que la historia tenía que contarla un narrador cuasi–omnisciente en tercera persona, un narrador que solo pudiese saber o estar en la cabeza del personaje que domina la escena porque, en el fondo, en El futuro en sus ojos, por ejemplo, el conflicto principal se refiere a un misterio sin resolver. Entendí que un narrador omnisciente, podía desbaratar mucho misterio.


Es importante también indicar al inicio de cada capítulo en qué año o, incluso, día y mes nos encontramos. Por supuesto, utilizo bastante la analepsis como solución a la sorpresas sobrevenidas de un inicio de capítulo in media res.


Por último, en la tercera parte de la saga, El presente de todo, cuando se han de resolver la trama principal y todas las subtramas, conseguí encontrar la manera de enlazar los capítulos de presente y pasado (no sé si esta técnica narrativa tiene un nombre propio o no) como si los personajes que están en el presente contasen,a través del narrador, lo sucedido en los capítulos del pasado. Así, la agilidad narrativa no se pierde a pesar de haber cambiado de época.

PDT 3D


Directamente, decidiste autopublicar esta obra, ¿por qué?

Esta historia estaba ideada como una novela única dividida internamente en tres partes. Por culpa de mi no planificación, mi autosuficiencia o mi vanidad, cuando di por concluida la novela siete años después de escribir la primera palabra, me encontré con unmamotretode más de mil páginas. Demasiado para un novel, para un novel no mediático, vaya. Tras seguir los consejos profesionales que había creído innecesarios antes, me di cuenta de que necesitaba reescribir algunas partes. Bastantes. Eso hizo que se alargase otros tres años el proyecto. Así que, diez años después, no disponía de la paciencia necesaria como para esperar la respuesta de una editorial. Entonces la autoedición estaba en auge y encontré quién me diese las herramientas para autopublicar de una manera prácticamente profesional.


Por ti mismo has llegado a vender más de 600 ejemplares de tus novelas (sin contar con la distribución de la editorial de autopublicación y libros en digital). ¿Qué crees que es lo que atrae a los lectores de tus historias?

Según me van comentando ellos mismos, podría resumirlo en tres aspectos. En primer lugar, personajes atractivos, verosímiles y que actúan de manera creíble: protagonista fuerte, el personaje simpático o un malo malísimo. En segundo lugar, la manera de narrar. Mostrar en lugar de contar, conseguir la sensación de estar junto al personaje, sintiendo, viendo u oliendo lo mismo que él. Esto hace que la historia atrape y, mientras lees, te abstraigas del entorno. En tercer lugar, explicar cosas de las que han oído hablar o, incluso, vivido. Muchas lectoras y lectores han contactado conmigo para explicarme cómo vivieron esa época ellos mismos porque leyendo la novela se habían vuelto a sentir allí. Este es uno de los lados buenos y mágicos que nos aportan lasredes sociales: la facilidad de comunicación entre lector y autor.


Tu trabajo no está relacionado, a priori, con las letras, sin embargo, esto no te ha impedido que desarrolles una gran necesidad de escribir. Te voy a guardar el secreto de sumario acerca de tu profesión, pero te preguntaré si en ella encuentras inspiración (porque sí que veo algo de relación).

Creo que estamos demasiado acostumbrados a la manera de narrar hollywoodiense donde las emociones se contienen demasiado y se substituyen por una exhibición de la violencia, a veces, desmesurada. Se censura la emotividad o la naturalidad sexual y se ensalza la violencia. Ya intuía que la realidad es muy diferente y, gracias en parte a mi profesión, lo he podido constatar. Hay quien puede pensar, al leer algunos pasajes de mis novelas, que las reacciones de algunos personajes a situaciones límite son exageradas. La realidad muestra que sí, que la contención existe, pero que lo que más predomina es la pasión a la hora de expresar un sentimiento, momento que se confunde a menudo con la sobreactuación. O por lo menos eso es lo que yo he podido observar gracias —o por desgracia— a mi trabajo.


CDP 3D 2


Después de El futuro en sus ojos, llegó Cuadernos del pasado. ¿Qué diferencia hay entre estas novelas?

Cuadernos del pasado rompe la estructura de las otras dos. Ya no tenemos capítulos intercalados de una época y otra. Es como si el lector tuviese entre sus manos un escrito de uno de los personajes. Son recuerdos de uno de ellos. En esta ocasión hay momentos en que el lector sabe más cosas que el propio protagonista y el interés es ver cómo el personaje va descubriendo secretos y va evolucionando. A mitad del libro el personaje ha madurado tanto que, de nuevo, es el lector el que va descubriendo más matices de la trama principal y el resto de subtramas. En esta ocasión la voz es la de un narrador protagonista. Fue un reto enorme ponerme en la piel de un solo personaje y encontrar la manera de contar todo lo que quería haciéndolo sólo desde su punto de vista y teniendo en cuenta tan solo lo que él había vivido en primera persona. 


Y tú, como escritor, ¿qué salto sientes que diste entre ambas?

En el impase entre una y otra parte, nació mi hijo. Cuadernos del pasado narra las experiencias de un niño que, en una época muy convulsa, se ve obligado por las circunstancias a madurar antes de tiempo, pero también ahonda en la forja de la extraordinaria relación entre un padre y su hijo. Estoy convencido de queno hubiese sido capaz de transmitir con tanta potencia esa relación paternofilial si no hubiese sido padre ya.


Tus novelas forman parte de una saga, pero ¿deben leerse de manera continuada o cada una forma una historia propia y autoconclusiva como tal?

Podrían leerse de manera separada, cada una tiene un conflicto principal que acaba resolviéndose, pero es cierto que el lector se perdería muchos guiños y detalles si no las lee en el orden correcto. Con la última, El presente de todo, el lector encuentra sentido a todo lo que podría no cuadrarle y todas las tramas y subtramas que envuelven a los personajes, acaban resolviéndose. 

Noticias relacionadas

"Misifú y otros cuentos" es una encantadora colección de 24 relatos ilustrados a color, pensados para sorprender y emocionar a los pequeños lectores. Cada cuento es un reflejo del vivir cotidiano, un juego narrado que explora el ser y el existir, invitando a los niños a ver la vida como un espacio de descubrimiento y diversión.

La bóveda de los recuerdos del escritor Carlos Alonso Sainz habla de memorias que se pierden, pero también de otras memorias que se recuperan, y el lector puede descubrir que estas tienen mucho que ver con nuestra historia más reciente, la Guerra Civil española. Sin embargo, Sainz nos asegura que este no es otro libro más sobre la Guerra Civil y vamos a descubrir por qué.

«¡Vieja bochinchera!, ¡todo es culpa tuya!», gritará uno de los protagonistas de la novela de Carlos Sanclemente, justo antes del cruento desenlace.  La mirada aviesa, el gesto torcido, las palabras malquistadas y sobre todo la envidia será el lodo que emponzoña el discurrir de este excelente libro del escritor colombiano, nacido en Popayán.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto