En lo que llevamos de verano España ha sufrido intensas olas de calor, ya que en algunas provincias han alcanzado más de 40 grados. En este sentido, se ha descubierto que el uso de sistemas de refrigeración que mitigan el calor, como el aire acondicionado, calienta el planeta. Se calcula que actualmente hay 3.600 millones de unidades de refrigeración en el mundo y la previsión es que en 2050 la cifra supere los 14.000 millones, según un estudio de la Universidad de Birmingham.
Los edificios dependen cada vez más de las unidades de refrigeración debido a la subida de las temperaturas, que aumentan año tras año. En junio de 2022 Deepki observó un aumento del 6% en el consumo de energía en los edificios que monitoriza en España, en comparación con junio de 2021, y esta tendencia va a continuar.
Los principales agentes del sector inmobiliario y los gobiernos son cada vez más conscientes de la importancia de afrontar este reto, provocado por el calentamiento global. El sector inmobiliario es responsable del 37% de las emisiones mundiales de CO2 y del 36% del consumo de energía.
Los edificios dependen cada vez más de las unidades de refrigeración debido a la subida de las temperaturas, que aumentan año tras año. Por este motivo, Deepki hace hincapié en la necesidad de que propietarios y gestores promuevan la rehabilitación de sus edificios e implanten prácticas más eficientes desde el punto de vista energético. La implantación de soluciones de alta tecnología, como Deepki Ready, permite a los usuarios tomar medidas inteligentes para mejorar la eficiencia energética de sus carteras.
Los expertos de la empresa explican las ventajas de adaptar los edificios para mitigar el cambio climático y obtener otros beneficios.
● Combatir y mejorar la resistencia al cambio climático: Ante el aumento de las temperaturas extremas, las sequías y las inundaciones, las reformas de los edificios se vuelven esenciales para adaptarse a estos retos. Entre las medidas que deben adoptarse figuran la limitación de las superficies acristaladas y la mejora de la protección solar, así como la importancia de normas como la ISO 2017-3:2015 para el aislamiento de los edificios.
● Reducción de los costes de explotación: La eficiencia energética de los edificios permite a propietarios e inversores atraer a más inquilinos y reducir los costes de explotación. Un ejemplo de buena práctica es el Grupo Azora, que ha invertido 2,5 millones para reducir las emisiones un 25% anual en los siete hoteles que ha adquirido en Med Playa. ● Preservación del valor de mercado: Las certificaciones de sostenibilidad aumentan el valor percibido de los activos inmobiliarios, evitando su depreciación y permitiendo el aumento de los alquileres. Las renovaciones son un criterio importante para obtener certificaciones como LEED Gold y Energy Star.
"La aplicación de estas medidas no sólo contribuirá a reducir la huella de carbono del sector inmobiliario, sino que también generará beneficios económicos y sociales, mejorando la eficiencia energética de los edificios y creando entornos más saludables y sostenibles para sus inquilinos. En definitiva, es esencial que el sector inmobiliario asuma su responsabilidad en la lucha contra el cambio climático. Adoptar medidas para reducir las emisiones de carbono es una necesidad urgente, y aplicando soluciones sostenibles, podemos contribuir a cuidar el medio ambiente y construir un futuro más resiliente", concluye Xana Muñiz, Vice President Southern Europe & LATAM de Deepki.
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