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Una apuesta segura para la salud: entrenador personal | |||
Crea programas de entrenamiento viables y personalizados, y orienta sobre los hábitos alimenticios más saludables | |||
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El fitness y una rutina de entrenamiento se han convertido en una parte integral de un estilo de vida saludable que tanto apelan desde la medicina. Si a eso se suma la idea de lograr los objetivos físicos, se requiere una combinación de ejercicio regular y una nutrición adecuada que no siempre es sencillo hacer de forma independiente. Precisamente porque muchas personas tienen dificultades para diseñar y seguir planes eficaces de entrenamiento y alimentación, es donde entran los entrenadores personales: pueden ayudar a los clientes a maximizar sus resultados de fitness planificando programas de entrenamiento personalizados, adaptando horarios para satisfacer las necesidades y creando planes de alimentación que respalden sus objetivos. Las funciones de un entrenador Una de las funciones clave de cualquier 'personal trainer' es diseñar planes de entrenamiento personalizados que se adapten a las necesidades de los clientes. Si durante años han sido una figura imprescindible en las grandes capitales en las que el tiempo cuenta y se necesitan entrenamientos efectivos, es ahora cuando empiezan a cobrar más relevancia si cabe en las zonas de costa. El turismo y la migración de muchos hacia destinos con playa está haciendo que sean muchos los que buscan un entrenador a domicilio en Málaga, en Alicante o en los principales núcleos donde el turista internacional también decide pasar largas temporadas. “Un buen entrenador evaluará primero el nivel de condición física y los objetivos del cliente, teniendo en cuenta cualquier lesión o condición de salud que pueda afectar su entrenamiento. Con base en esta información, creará un plan de entrenamiento personalizado que incorpore una variedad de ejercicios para evitar el aburrimiento y los estancamientos” explican desde Actívate y Nutrición. Por ejemplo, un cliente que quiere desarrollar músculo puede necesitar un plan de entrenamiento diferente al de alguien que quiere perder peso. Otra función importante de un entrenador personal es ayudar a crear programas de entrenamiento viables y adaptarlos según sea necesario en el día a día. Muchas personas luchan por encontrar tiempo para hacer ejercicio en medio de sus apretadas agendas, y un entrenador puede brindarles orientación sobre cómo equilibrar el entrenamiento con los compromisos laborales y familiares encontrando un espacio en el día que pueda ser flexible. Finalmente, otro de los pilares de cualquier entrenador es la orientación sobre hábitos alimentarios saludables y crear planes de alimentación que respalden los objetivos marcados. Un buen entrenador comprenderá las necesidades y preferencias nutricionales de sus clientes y creará un plan de alimentación adaptado a sus objetivos, ya sea desarrollar músculo, perder peso o mejorar la salud en general. También educarán a los clientes sobre la importancia de una nutrición equilibrada y hábitos alimentarios saludables, como evitar los alimentos procesados y comer muchas frutas y verduras. |
El II Foro de Lupus del País Vasco, celebrado los días 4 y 5 de abril en Bilbao, ha puesto de manifiesto la complejidad del lupus, una enfermedad autoinmune y sistémica que afecta a múltiples órganos del cuerpo y que requiere de un abordaje precoz por parte de los especialistas en Reumatología.
Coincidiendo con la celebración del Día Mundial de la Salud, se lanza la campaña "Comienzos saludables, futuros esperanzadores". Esta iniciativa, impulsada por la OMS junto con diversos socios internacionales, busca intensificar los esfuerzos para eliminar las muertes prevenibles de madres y recién nacidos. A través de esta campaña de un año de duración, se busca también fomentar un compromiso continuo con la salud y el bienestar a largo plazo de las mujeres.
En España, más de 11 millones de personas sufren alguna enfermedad reumática, siendo estas muy variadas entre sí como las patologías musculoesqueléticas, las autoinmunes sistémicas o las autoinflamatorias. No obstante, a pesar de ser distintas, la mayoría comparten determinados síntomas, como rigidez, inflamación, dolor, etcétera.
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