Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Libros
Etiquetas | Poemas | Poesía | Versos

Diez poemas

Poesía
Rolando Revagliatti
lunes, 19 de febrero de 2024, 09:12 h (CET)

menú


memeces y naderías banqueros y bancarios

ojos de agujas y ojos de buey

castas y castizas

gentes de capital y de capital federal

mundos e inmundos juntos y aislados

confluyen en el menú con silabeos y gemidillos de cómo

cae la lluvia en karaganda y en tacuarembó

para plasmarlo con fondo plúmbeo

de inequiparables extranjerías

o extranjerías equiparables

vuelvo transido de perfil y tres cuartos

y de frente frío o caliente

informó juan que apostó pedro

pedrojuanismo utilitario

lo mismo para un pulido que para un rascado

menú

          maní

                       maná

nombres en la noche


aquí tomando sol de bajo calibre

bebiendo vino fino con arena gruesa

pachorrientos y sin embargo produciendo nuestros propios opiáceos

—endorfinas y encefalinas—

y hasta la mesma anfetamina

imprescindibles para todo criollo que se precie

no fue en la antigua grecia (o roma, en su defecto)

ni fue en una isla —formentera, mayaguana, rarotonga— contemporánea de la estupidez o el descuido

ni fue en un claro u oscuro del bosque o caballo

ni fue a través de acuerdos moleculares

o de otros naturales frangollos

torrentes como el sanguíneo

popeye balanceando tatuajes

olivia detrás de la concertación de sus pestañas

la espinaca dotando al marinero

cartoon

retomando a la estupidez por sus orejas tóxicas

nos permitiremos reiterar países y provincias

imprecisamente habilitados por indiscernibles monigotes

que blanden nuestros nombres en la noche

cerrada a vaticinios

in memoriam de mí, la desbordada y el entregador


desde niño me broto en primavera

púber ya me doy a derramar

joven soy sin pelos

y fastidio:

seno, cuna y cama

no siento al ciento por ciento

(frascos de rechupete con difenilhidramina

—o codeína o dextrometorfán—

aguardan por mí en la heladera)

sentir es chocar

¿jarabe o más que padre es un amigo?:

rapiñar una víscera en combate

reino animal


una pizca de inercia y remembranza

de sangre fría circulación incompleta

y respiración branquial primero y luego pulmonar

y una mujer mira a una mujer

que mira a otra mujer mirar a otra

que me mira mirando desear y sonreír

a maría schell encantadora de batracios

de felicidad

yo por ejemplo croo

capicúa


te escribo desde mi afiatadísimo trigémino

en el ocho del ocho del ochenta y ocho

festejando tan sorprendente capicúa del siglo

con mis huesos mal avenidos

y nudos en trapecio

asocio con circo migrañoso

donde las fieras rancias y toda mi heroica trup

(honrosa, sensible y predestinada)

se rematan al mayor costo

psíquico y atentamente

primeros tiempos


primeras fechorías del ladrón de calcio

primeros fantasmas primeras ambivalencias

primeras lenguas primeras poluciones

primeros muertos

primeros proyectos primeras obras

primeros tiempos con ángela

últimos tiempos y final con ángela

últimas aproximaciones

correlato


el olvido de los zapatitos

del ojo de la novia

del blanco tul y de la lágrima

al lado del alado caballero de frac

con pico amarillo y cabeza de avechucho verde

con toda la lógica escatológica iconográfica

a ras de la turbiedad y el descrédito

debajo de la cera

peligrábamos en el batifondo espiritista

no renunciábamos no retrocedíamos

nos caíamos de la mismísima rama del falso cedro de la verídica huerta

o nos apelmazábamos profanados por un decir

éramos harina de un costal vigilado

apenas apenados por nuestra prestancia de vaga bakelita

profanados vigilados apenados apareados

a merced de un extravagante correlato

uncidos al destino cada quien germinaba a solas

anualmente comparativos ineficaces

en un simposio de potrero nos pasábamos lista

mientras los pájaros teóricos volaban como cien

me


esta música me puede

esa autora —ursula kroeber le guin— me puede

los gentilicios me pueden

las estratagemas me pueden

las mujeres de mi pasado me pueden

la manía me puede

esa mamá me podía

ese papá no

el recuerdo de ese papá me puede

los diminutivos me embisten

las vocaciones me administran

los fervores me consumen

la gratitud me asombra

la beatitud me chinga

la rima interna me tienta

la vanidad me hace morder el polvo

los polvos caben en la lírica

la lírica me puede

el resentimiento me asalta

la decepción me asalta y me consume

me puede

la remuerrección de finndenuevo

presentaciones


(a carlos de la púa)

el capar la razón esclavos del aburrimiento

la davi se da vuelta como una tortuga

qué tendrá el pejerrey que está tan tristongo como yo

qué tendrá el sapo

qué tendrán el pelícano y el ornitorrinco

mis jóvenes amigos los presento huyendo

del capullo de yiro de tarifas irresistibles

y del diente nocturno de la loca del cementerio de flores

buenos aires a caballo


vía crucis buenos aires en la ofrenda ombligal

y otros pases

a una constelación levantadita

buenos aires el mejor bocado me baraja

es viva buenos aires

a caballo zaino regalado de atípicas desdichas

hoy vine a sublimarla

aunque

buenos aires multisectorial

la atravieso

con todo mi cariño


4   Rolando Revagliatti (Auster) en enero 2024

Noticias relacionadas

Ese corazón está puesto muy lejos concurren expedicionarios. Resarce el aire cerca del oro. Me las vi con uno que más que como yo

era en efecto yo viéndoselas conmigo. Tan intrincada como lúdica resultó la finalmente para nada excepcional contienda de resultas de la cual redacto ahora este sosiego.

¡María, es hora del camino! que el César nos obliga y apremia, yo preparo el borrico tú, la ropa para el niño…

Ese día, el doctor Odrayab antes que llegaran sus invitados, rememoraba: el asiento continuaba vacío, y al llegar el tren que llegaba del norte, compartirlo o no, prefiero la soledad por la comodidad que representa, aunque siempre una hermosa mujer con quien pueda establecer una conversación estimulándome de futuro, esto nunca me ocurrió en más de diez años de viajar todos los días.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto