La Asociación Galgos del Sur ha anunciado la apertura del juicio oral contra la revista Jara y Sedal y dos de sus redactores, a raíz de una querella presentada por la asociación en 2022. Los cargos incluyen un delito continuado de calumnias con publicidad, por el que se solicita una pena de 24 meses de prisión para cada acusado, así como un delito continuado de injurias con publicidad, respecto al que se piden catorce meses de multa a razón de 20 euros diarios para cada acusado, con responsabilidad personal subsidiaria, a todo lo cual se le suman las costas.
Además, se exige una indemnización de 18.000 euros por los daños ocasionados a la Asociación y dos de sus miembros. Por todo ello, el Juzgado ha requerido a los acusados para que presten una fianza que supera los 35.000 euros.
Los hechos se remontan a octubre de 2021, cuando Jara y Sedal publicó un total de cuatro artículos en los que se congratulaban por la supuesta recuperación de una galga de caza que había sido encontrada vagando sola por una carretera de Córdoba, sin identificación mediante microchip, y que fue recogida por Galgos del Sur en sus instalaciones.
En el artículo se vertían una serie de acusaciones contra la Asociación y dos de sus miembros, en relación a la desaparición y posterior hallazgo del animal, a la intervención de la Guardia Civil, así como respecto a otra serie de supuestas actividades ilícitas en las que Jara y Sedal involucraba a Galgos del Sur. Asimismo, en los artículos se les acusaba de fomentar el odio hacia los cazadores, se hacían públicos los nombres y apellidos de los responsables de la asociación y se revelaban otra serie de circunstancias personales.
Estas publicaciones provocaron la interposición de una querella que podría costarle bastantes miles de euros a la revista, cuyas pretensiones han sido rechazadas hasta la fecha, como, por ejemplo, el recurso de apelación formulado por los ahora acusados contra el Auto que incoaba el Procedimiento Abreviado, en julio de 2023. La Audiencia Provincial, vino a desestimar dicha apelación sobre la base de que: “nos basta la existencia de indicios y la existencia de hechos que pudieran calificarse en un tipo penal (…) resultando trascendente la afirmación de existencia entre el contenido de los atestados y lo publicado y las contradicciones respecto al contraste.”
Ahora tendrá que ser el Juzgado de lo Penal el que dilucide en el juicio, cuando se señale la fecha de este, si los acusados pueden demostrar la veracidad de la información publicada o, al menos, el cumplimiento de su deber de diligencia informativa, ya que, desde Galgos del Sur niegan rotundamente todas las acusaciones vertidas por Jara y Sedal, y afirman que, en ningún momento, nadie de la revista les ha contactado para contrastar los hechos, ni se reflejó su versión en las publicaciones.
MALTRATO ANIMAL
Recientemente la asociación especializada en rescate y adopción de galgos y otros perros usados para la caza Galgos del Sur, ha rescatado un total de siete perros, uno de ellos muerto y los otros en mal estado, en una nueva "finca de los horrores", en La Rambla, (Córdoba).
De los siete animales, según ha informado este lunes la asociación en un comunicado, seis estaban vivos, pero "en muy malas condiciones", y un séptimo ya había fallecido de inanición.
El rescate se produjo el pasado martes en un decomiso efectuado por el Seprona de la Guardia Civil y la Policía Local de la Rambla, que fueron alertados de la situación en la que se encontraban los perros.
El Seprona, según el comunicado, abrirá diligencias tras esta intervención por un presunto delito de maltrato animal, en el que "al menos una de las dos personas implicadas es cazador".
Los seis perros supervivientes se encuentran ya en el refugio de Galgos del Sur, en Villafranca de Córdoba, donde la protectora está trabajando en su recuperación física y psicológica.
El cofundador de Galgos del Sur y participante del decomiso, Javier Luna, ha explicado que "las condiciones del rescate de los animales fueron muy duras". Luna ha señalado que tuvieron que sacar al galgo muerto, con signos de desnutrición y deshidratación severa, de "un agujero que él mismo había excavado en la tierra para resguardarse de las altas temperaturas".
Además, cuatro de los galgos estaban "aterrorizados" e intentaban huir, lo cual complicó aún más su captura. Los animales estaban caquéxicos, desnutridos y plagados de parásitos y "sus vidas corrían también mucho peligro ante el estado de absoluta dejadez y falta de atenciones básicas y veterinarias que estaban sufriendo".
La Asociación ha denunciado que se encuentra en una "situación límite", ya que ha recogido, en lo que llevan de año, más de 200 perros de caza.
Luna ha resaltado que "la situación es insostenible porque "desde que se aprobó la nueva Ley de Bienestar animal, excluyendo los perros de caza, ha aumentado considerablemente el abandono y maltrato a las razas utilizadas por este sector".
La caza es una actividad violenta que se mantiene a costa de mentiras para aburrir y las administraciones deben atajarla de inmediato.
Los satélites mediáticos de los cazadores la defienden con constantes bulos, pero esta vez tendrán que responder penalmente y el juzgado decidirá.
Busca en redes sociales "Asociación galgos del Sur", pues así puedes seguir la labor que realizan en protección de los animales, especialmente los que los cazadores cada año desechan en condiciones terribles.
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