Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | El segmento de plata | Nevadas | Málaga | Recuerdo | mayores

El día que nevó

​Los que en estos días paseamos por las playas malagueñas, hemos podido divisar montes nevados por poniente y por levante
Manuel Montes Cleries
jueves, 6 de febrero de 2025, 11:56 h (CET)

Los que en estos días paseamos por las playas malagueñas, hemos podido divisar montes nevados por poniente y por levante. Esta imagen ha hecho aflorar a mi memoria viejos recuerdos. Los miembros de la generación a los que califico como “segmento de plata”, nos tenemos que defender de las hordas edadistas (que consideran a los mayores como unas gentes de segunda categoría) a base de presumir de nuestras vivencias, bajo el grito de “que nos quiten lo bailao”.


Como además sucede que el presente y el futuro no se presentan demasiado halagüeños, tiro de mis recuerdos, a fin de resucitar acontecimientos de mi generación y transmitir experiencias a aquellos que aun no han podido disfrutar de momentos mágicos que tardaran mucho en volverse a producir.


Me refiero, en este “segmento” de hoy, a aquella fecha clave del 3 de febrero de 1954. Ha transcurrido la friolera de 71 años. Aquella mañana me aprestaba a asistir a clase en el viejo colegio de San Agustín. Yo era uno de aquellos niños de la 4ª que caíamos en manos de Don José, en un aula cuya ventana aun podemos observar desde la entrada a la iglesia de los Agustinos.


Ese día, al salir a la calle, descubrimos que había nevado. No era cuestión de perder el tiempo haciendo divisiones en clase con su correspondiente prueba del nueve. Nos dirigimos en plan bélico hacia los aledaños de la catedral donde topamos con los alumnos de los Maristas que habían venido Alcazabilla hacia abajo. Para colmo, entre “mariscos” y “langostinos”, que eran los epítetos con los que nos insultábamos maristas y agustinos, apareció una tercera caterva, en este caso femenina, del colegio de las Teresianas. Se produjo cierta batalla “neval”.


Todo un compendio de jóvenes sorprendidos por una libertad momentánea, mezclada con una situación meteorológica desconocida por todos. Una experiencia inolvidable. No se ha vuelto a repetir. Tan solo alguna tormenta de granizo, que apenas ha cuajado en nuestras calles y, algún invierno, una visita a las Pedrizas cercanas, para ver un pequeño manto de nieve a nuestro alrededor.

En este paraíso terrenal que es nuestra Málaga, tenemos otras circunstancias meteorológicas que nos hacen únicos. Ayer, a media mañana, pude ver en las playas del Rincón a una treintena de deportistas haciendo Pilates en camiseta bajo un sol radiante. Mirabas al oeste y te encontrabas la Sierra de las Nieves cubierta de una amplia capa nevada. Al este se alzaba la maroma con su cima llena de nieve. ¿De qué nos podemos quejar?


Añoramos aquél día que nevó. Más por la edad que teníamos que por otra cosa. No es bueno vivir de los recuerdos. Lo importante es sacar jugo al presente. Pero tampoco es malo mirar de vez en cuando hacia atrás y recuperar aquellos momentos agradables.


Sigo quedándome con los inviernos soleados de nuestra costa y el clima que envidian aquellos que nos visitan. Pero una nevada de vez en cuando tampoco vendría mal. Nuestros nietos lo disfrutarían. Como hicimos nosotros aquel día de febrero hace 71 años.

Noticias relacionadas

Durante este Martes Santo, la liturgia cristiana recuerda los discursos y las enseñanzas de Jesús en el templo de Jerusalén. Este día, tal como lo presenta el Evangelio según San Mateo (capítulos 23 al 25), está marcado por la controversia con los fariseos y doctores de la ley, la denuncia de la hipocresía religiosa, y la proclamación de parábolas que invitan a la vigilancia, la fidelidad y la responsabilidad en la espera del Reino.

Vivimos en una sociedad que ha conseguido establecer una paradoja que no tiene fácil solución: mientras que la población está cada vez más envejecida, los mensajes y las formas de vivir son más juveniles. Lo primero es un problema para los jóvenes, que soportarán dentro de veinte años una carga fiscal destinada a pagar las pensiones. Seremos una sociedad de abuelos cuidando abuelos.

Con motivo de la nueva normativa argentina respecto del tipo de cambio “en flotación” y el levantamiento del cepo que impedía la libre compraventa de moneda extranjera, algunos periodistas locales se asombraron de la expresión “personas humanas”, pues tanto el decreto como la normativa del Banco Central la utilizan para diferenciar el régimen cambiario y financiero respecto de las personas jurídicas (de existencia ideal).

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto