Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Cantar por no callar | Casa Real

Safari Real accidentado

El Rey se ajusta el cinturón matando elefantes
Rafa Esteve-Casanova
domingo, 15 de abril de 2012, 09:26 h (CET)
Un catorce de abril de 1931 el abuelo del actual Rey de España salió del país hacia el exilio a uña de caballo y justo 81 años después los españoles se desayunan con un comunicado de la Casa Real en el que se comunica que Juan Carlos de Borbón ha sido operado para colocarle una prótesis en la cadera que se fracturó cuando se encontraba en Botsuana cazando elefantes. Muchos han visto una metáfora en esta caída justo cuando llegaba el día en que los republicanos, cada día más, se disponían a celebrar la efemérides. No están los tiempos para que la III República llegue a España, la gente está preocupada por otras cosas, especialmente por esa economía que Mariano Rajoy prometió llevar a buen puerto y que, visto lo visto, está a punto de naufragar como el Titánic del que también este 14 de Abril se han cumplido los 100 años. Pero la verdad es que es la propia familia Borbón la que desde hace algún tiempo está atizando el fuego republicano con sus actitudes.

La semana comenzó con la triste noticia de que el adolescente Froilán, 13 años tan sólo, se había disparado un tiro en un pie cuando se encontraba ejercitándose en el oficio de las armas junto a su padre, un padre que por cierto ha demostrado ser un irresponsable al dejar que su hijo manejara una escopeta del calibre 36 cuando sabía perfectamente que estaba cometiendo una irregularidad ya que hasta los 14 años no se pueden manejar armas de este calibre. Pero, al parecer, para los Borbones y sus allegados todo el monte es orégano y hacen de su capa un sayo y algunos de ellos se pasan la legislación por el arco de triunfo, al fin y al cabo se creen impunes. Como impune se ha considerado Iñaki Urdangarín para aprovechándose de su condición de marido de la Infanta Cristina perpetrar negocios al amparo de la Real Casa que no puede alegar ignorancia de los tergiversadores negocios del consorte Duque de Palma ya que en el año 2006 se ordenó que los dejara. Algo turbio vería el Rey en los trapicheos de su yerno cuando le proporcionó un buen puesto en Telefónica y le mandó al exilio dorado de Washington.

Ahora ha sido un accidente durante un safari, nada barato por cierto ya que se habla de hasta 45.000 euros por acudir al mismo, lo que ha destapado los viajes del Monarca, viajes de asueto a los que tiene todo el derecho pero que en los tiempos que corren demuestran una falta de ética por parte del Jefe del Estado. Cuando desde el Gobierno y a la voz del ordeno y mando de la teutona Merkel cada día vemos cómo se van recortando los derechos y beneficios sociales de la ciudadanía no parece una conducta apropiada que la primera autoridad de la nación se dedique a ir de safari para satisfacer su ego de depredador. El pueblo llano, y no es demagogia, se queda en casa, muchos ya la han perdido por no poder pagar las hipotecas, mientras quien debería dar ejemplo de austeridad marcha a un lejano país africano a abatir elefantes utilizando un avión privado, llevando su sequito de escoltas que pagamos con nuestros impuestos y sin que nadie sepa donde está.

En la mayoría de monarquías democráticas cuando el Jefe del Estado deja el país para realizar un viaje privado informa el Gobierno correspondiente, en España no existe ninguna ley que obligue a ello pero dentro de esa transparencia de la que presume la Corona desde que estalló el caso Urdangarín sería conveniente que cuando el Rey marcha en viaje privado fuera de España al menos lo comunicara al Gobierno y que éste no tuviera que enterarse leyendo la prensa porque ha ocurrido un percance. Son muchas las cosas que todavía están ocultas en los cajones de Zarzuela, la monarquía se quiso lavar la cara cuando el pasado 28 de Diciembre, día de los Inocentes, detalló cómo se gasta el presupuesto que le otorga el Gobierno aunque aquellas cuentas no eran reales, faltaba añadir a las mismas la parte de presupuesto de diversos Ministerios que también contribuyen al mantenimiento de una institución como la Monarquía que en estos tiempos ha quedado totalmente obsoleta.

La llamada primera familia del país está totalmente desestructurada, cada uno va a la suya, el Rey en vez de acudir a visitar a su nieto accidentado marcha a cazar elefantes, la Reina, por otra parte, está celebrando la Pascua en Grecia y no ha interrumpido su viaje para acudir a estar junto a su esposo en el lecho del dolor, algo huele a podrido y no es en Dinamarca precisamente. A Juan Carlos de Borbón lo impuso como Rey el dictador General Franco, al pueblo nunca se le dio ocasión para elegirle y se utilizó el subterfugio de la Constitución para introducirle por la puerta de atrás, después del golpe de Tejero y Milans del Bosch se idealizó la figura del Monarca como gran salvador del país pero últimamente nos hemos enterado por un periódico alemán de que los militares golpistas gozaban de su simpatía. La llamada Transición nunca tuvo lugar en este país donde mientras todos vemos disminuidos derechos y salarios los banqueros siguen amasando millones de euros, la Iglesia no paga impuestos y a la Casa Real tan sólo se le rebaja un 2 % en su presupuesto. Mal lo va a tener el sucesor si es que algún día llega a ceñirse la Corona. Otro 14 de Abril el símbolo de la Monarquía ha caído aunque esta vez haya sido por una rotura de cadera.

Noticias relacionadas

China tiene la vista puesta en Groenlandia como lugar de tránsito especialmente útil en la «ruta de la seda polar», y también tiene una importancia estratégica para Estados Unidos, con una base militar en Thule, en el extremo norte. Para evitar la influencia china en la isla, Trump lanzó la boutade de comprar Groenlandia a Dinamarca.

En la Puerta del Sol, en Madrid, mi madre acudía con asiduidad a “Los guerrilleros”, una zapatería que, como casi todo de lo que tengo recuerdo, ya no existe. Bajo el eslogan “No compre aquí, vendemos muy caro” estaba siempre llena y vendía bastante calzado. Yo me quedaba perplejo al pensar que mis padres, a los que rara vez les sobraba el dinero, adquirían los zapatos allí, desoyendo el consejo que el propio establecimiento hacía.

En la familia, los hijos son el pensar y la razón fundamental del vivir en esta vida. Lo mejor, lo bello y los momentos felices a ellos los debo. Ahí mi compromiso. Mas nuestra hora va pasando, en cumplimiento de la ley inexorable de la vida. Uno trasciende en la memoria de sus hijos, perseverando hacia la superioridad de sus conocimientos para bien de sus obras, pretendiendo sean mejores o superiores a uno.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto