Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Cristianismo originario | Animales

Los animales no son mercancías sin vida

Los crueles experimentos con animales se llevan a cabo en muchos lugares sin ninguna mala conciencia
Vida Universal
martes, 31 de octubre de 2017, 07:23 h (CET)
Muchas personas maltratan sin escrúpulos a los animales, criándolos en guetos como animales de matanza, a los que luego se da muerte en los mataderos, muchas veces de forma brutal; y su carne es consumida. O se les cría en laboratorios científicos para hacer experimentos con ellos. Se actúa como si los animales fueran una mercancía sin vida.

Por ejemplo el cazador se desliza sigilosamente por el bosque y se esconde en miradores de madera elevados para matar a tiros traicioneramente al animal inocente, el que habiendo sido muchas veces solamente herido, se arrastra como puede atemorizado y dolorido hasta perecer lastimosamente. O pensemos en el agricultor que esparce sus agentes químicos de combate contra la vida de los suelos, como por ejemplo los pesticidas, fungicidas, herbicidas y todo cuanto pueda obtenerse como medios de exterminación. También esparce excrementos animales o humanos en la capa arable de la tierra. Debido a todas estas intervenciones en la naturaleza, la vida de los suelos se convulsiona y luego se asfixia.

Que los animales criados como animales de matanza pasen su existencia vegetando en establos indignos, hasta ser transportados hasta el matarife que acaba entonces con ellos brutalmente, es algo que al agricultor igualmente le importa poco. Su religión determina que los animales no tienen alma y que por tanto solamente son un factor económico.

Los crueles experimentos con animales se llevan a cabo en muchos lugares sin ninguna mala conciencia, porque los representantes de la religión de determinadas clases de personas afirman que los animales no tienen alma, que únicamente son una mercancía cuyo uso arbitrario está autorizado. ¿Cree esta sociedad grosera que esto y otras cosas quedan sin efecto? La desmesura y la falta de respeto ante el mundo animal al parecer no conocen límite alguno. ¡Pero los animales sí que tienen alma! Su Creador es Dios, que les ha infundido el hálito de la vida.

Noticias relacionadas

Yo creía (torpe de mí) que en pleno año 2025 los rectores de una televisión pública observarían escrupulosamente las normas más esenciales de educación cívica y el respeto exigible para las creencias religiosas de todo el mundo. Pero he comprobado que no es así.

Quien hace hoy negocio con todos es el capitalismo. Aquellos valores de la intelectualidad de la Ilustración, que iluminaron al capitalismo moderno, entre los que merecen ser citados humanidad, progreso, bienestar, derechos, libertades y justicia. Todos pasaron a ser proyectos que más tarde se han ido adecuando a sus intereses mercantiles, a la vez que se iba modelado la mentalidad general.

En los inicios del nuevo año, camino de la Epifanía, emprendo una relectura de Karel Capek, padre de la palabra “Robot” en su obra “R.U.R”, designando así, ya en 1920, hace más de cien años, mediante el acrónimo del título, a las máquinas humanoides por él ideadas, mucho antes de que acuñásemos el sintagma Inteligencia Artificial o de que a nadie se le ocurriese hablar de transhumanismo.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto