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Al menos cinco supuestos miembros del grupo yihadista Estado Islámico murieron en un bombardeo ejecutado el 31 de enero cerca de la ciudad iraquí de Kirkuk (norte), según ha confirmado este martes el Ejército de Estados Unidos. El Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM) ha indicado en un comunicado publicado en su cuenta en la red social X que el bombardeo fue ejecutado por las tropas iraquíes, con apoyo de las fuerzas estadounidenses, sin que Bagdad se haya pronunciado por ahora. "Una operación inicial tras el bombardeo halló múltiples cinturones explosivos y otros materiales", ha señalado, antes de agregar que la operación es parte de los esfuerzos conjuntos para "degradar las capacidades de Estado Islámico, desmantelar su red de ataque y garantizar su derrota duradera". En este sentido, ha recalcado que el grupo "sigue siendo una amenaza para la región y más allá" y ha añadido que "el CENTCOM, junto a sus socios y aliados, seguirá buscando de forma agresiva a estos terroristas para proteger la patria".
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