Cultura

El lloro ganó a esas mil tormentas

y mil mares de tormenta cayeron por tus retinas tristes y transparentemente de luto...

Bukowski

Bebo un poco de Bukowski, me fumo un poquito a Bukowski, o me tiro un poquito a Bukowski.

Aquél que no pudo vivir y simplemente murió

Y el ayer llegó al fin de sus horas tristes...

Este fin de destino fue un hasta luego

La vida cayó al son del luto de este adiós pasajero...

Esa vida anterior acaba de llegar a su ser

Cuando abrió aquel disco, lo puso en su viejo tocadiscos y volvió a soñar su vieja vida...

Se partió el amor en dos besos trucados

El amor partido, de esos besos mudos, el amor partido, de esas lágrimas secas algo compartidas.

Vive

Aunque de lo que digo, digan: “Eso es perder el tiempo”;
prueba, porque yo pienso que tan sólo así “lo ganas”

Los gays

No soporto a los gays. Me dan asco. Si soporto a mi amigo Ignacio, que es gay, es porque me acompaña algunos sábados a comprar zapatos, bolsos, camisas y pantalones.

De tanto llorar se me olvidó la vida

Y cayó la vista al son de las cien mil lágrimas secas...

Aquella chica que no sentía los besos

La apatía fue algo más alegre con sus besos sordos...

La cultura amenazada

La cultura siempre está estrechamente relacionada con el sistema social en el que se ubica y desarrolla.

Esta vida casi murió ayer

Esta vida está medio muerta, del color luto grisáceo...

La vida tan real sin sueños tristes

Era tan real que se olvidó de soñar... Era tan real sin sus sueños tristes.

Augusto Roa Bastos en mi memoria

Esta semana se cumplieron cien años del nacimiento del escritor paraguayo Augusto Roa Bastos, quien encarnó como pocos el dolor paraguayo del destierro y el infortunio del exilio.

Mendigo asqueroso

Qué asco. Paro el coche en el semáforo rojo y ya está el mendigo pidiendo en mi ventanilla.

Algo más que tristemente vivir

Algo más que un suspiro, algo más que un triste minuto, algo más que un tristemente ser...

Mi libro

Me dan asco los libros. Si soy una puta maestra, ¿quién me manda intentar ser una puta escritora? Vaya época de mierda para ser escritora. Para vomitar.

La teoría del valor

Smith pensaba que tenían que existir unas leyes ciertas que proporcionaran un sentido al funcionamiento de la sociedad.

Y la noche mató al día

El Sol daba alegría, daba vida.

El amante aquel

La luna le lloraba al alba, nadie a la princesa consolaba, ella estaba triste, a su caballero anhelaba y su marido, el rey, la maniataba.