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Se han perdido aquellas familias jóvenes que se ponían a la tarea de incrementarse apenas los varones volvían de la mili, encontraban un trabajo y gozaban de un trabajito adecuado. Nos vemos abocados a la extinción de la especie. Eso sí. Hartos de fornicar y escasos de amar.
España con un índice de fecundidad de 1,3 hijos por mujer frente al 1,5 de media europeo, sigue a la cola en Europa en cuanto a recursos para promover la natalidad y la conciliación de las familias. Las prestaciones por hijo -al contrario que en la mayoría de países europeos- en España no son universales.
La sociedad española está inmersa en un proceso de envejecimiento, aunque en los últimos años este fenómeno se ha acelerado. Así lo demuestran los principales datos demográficos del INE, que revelan que, entre 2010 y 2020, la tasa de natalidad se redujo un 29,85%. Hay múltiples factores detrás de esta tendencia poblacional, pero uno de los grandes culpables es el aumento del coste de la vida.
Lo que está sucediendo en esta España, muchas veces irreconocible, en cuanto a su despoblación, envejecimiento y falta de nacimientos a cargo de su población nativa, seguramente tiene su origen principal en esta ola de feminismo que parece que se está imponiendo, mediante la cual las mujeres han decidido que su función natural, en cuanto al ciclo reproductivo, ha de supeditarse a su comodidad, sus llamémosles libertades y sus otras opciones.
Uno de cada 18 municipios españoles no tiene menores en edad escolar. Esto significa que 454 pueblos de un total de 8.131 núcleos de población que hay en España carecen de relevo generacional. Este dato, del que se hizo recientemente eco la Secretaría General para el Reto Demográfico en sus redes sociales, es el reflejo tanto de la situación que se vive en la denominada 'España vaciada' como del descalabro de la natalidad en España.
Se ha presentado 'Lo esencial en Medicina Reproductiva', una guía clínica que define de manera sencilla y avalada por la medicina basada en la evidencia, el estado actual del conocimiento científico en medicina de la reproducción. Según este trabajo, la media de edad de las mujeres españolas que dan a luz su primer hijo está en 32,6 años y hay más madres con más de 40 años que con menos de 25. La reproducción asistida ayuda a aumentar la natalidad y es hoy una necesidad social.
Nadie es ajeno de que, en España, la natalidad va cayendo de año en año. De hecho, durante la última década los nacimientos han caído en un 30%, una cifra nada despreciable e indicativa de que las mujeres españolas no están por la labor de tener hijos y, si lo estuvieran, lo hacen a edades en las que existen factores físicos y sociales que limitan el número de hijos que los matrimonios o las madres solteras están dispuestas a tener.
Parece que los españoles se decantan más por tener una mascota en casa que un hijo. Que la natalidad está bajando año tras año es un dato que ya nadie duda, el año pasado el número de nacimientos se redujo un 6,1%, unos 23.879 niños menos, un número que aumenta considerablemente si nos remontamos a los últimos cinco años, llegando a los 58.293 nacimientos menos, lo que supone un 13,7% de diferencia.
Casi al mismo tiempo que se manifestaba en Madrid la “España vacía” el Instituto de Política familiar presentaba su informe sobre el Aborto en España, en el que señala que el aborto es una de las causas del déficit de natalidad en España y que ha invertido la pirámide poblacional, lo que hace problemática la mera supervivencia de España, tal como ha sido hasta ahora.
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